"Traficaré hasta que me haga rico o hasta que me cojan"

15 de Noviembre de 2016

Desde el cerro la Bajadilla hasta el paseo marítimo de La Línea de la Concepción, pasando por una desembocadura del Guadarranque todavía sin la famosa barrera "antinarcos". El programa Fuera de Cobertura de Cuatro ha emitido un espectacular reportaje en el que la reportera Alejandra Andrade se ha adentrado en el mundo del narcotráfico sin tapujos. 

El reportaje comenzó en el cerro de la Bajadilla, con la Iglesia Sta. María Micaela al fondo, los vecinos de uno de los barrios más famosos de Algeciras desfilan por delante de las cámaras de Mediaset hablando de sus flirteos con las drogas o de familiares que se hayan presos, en Marruecos o en Botafuegos, así como de la facilidad que encuentran para adentrarse al mundo del narcotráfico. De ahí a la Piñera pasando por San José Artesano, vecinos de la localidad de Algeciras cuentan sin tapujos, algunos a cara descubierta, sus idas y venidas en el mundo del narcotráfico y los años que han pasado presos por ello.

En escena aparece Jorge Romero, alcalde de Los Barrios, que se cita con la periodista en la plaza del ayuntamiento barreño donde departe con otros vecinos sobre el narcotráfico en la comarca y la necesidad de regular el paso de embarcaciones en los ríos que desembocan en la Bahía de Algeciras.

Mezclando imágenes de carreteras de la Costa del Sol con Algeciras o La Línea de la Concepción, la reportera se monta en el coche de un supuesto narcotraficante encargado de toda la logística del hachís, explicando con no demasiados detalles cómo funciona el negocio. Tras esto, se cita con otro narcotraficante, que desempeña el comunmente conocido trabajo de punto, que en un lugar de la geografía que no se corresponde con el Campo de Gibraltar explica cómo desempeña su labor.

Alejandra Andrade, reportera de Fuera de Cobertura, se reúne con otro grupo de narcotraficantes a la orilla de una playa, donde le muestran un sinfín de lanchas hinchables que allí yacen tras haber cumplido su trabajo de costa a costa. En este punto oímos a uno de los narcotraficantes afirmar que "traficaré hasta que me haga rico o hasta que me cojan". Tras esto y casi sin dejar de que el espectador parpadee, la reportera se embarca en una persecución a cargo de Agencia Tributaria en una embarcación de Aduanas, que acaba de manera infausta en plena costa linense debido a la rotura de un motor del buque de los agentes.

Pero el reportaje no acaba ahí, la reportera se cita de nuevo en la carretera hacia Punta Carnero con más narcotraficantes, en este caso un conductor que será el encargado de transportar la mercancía en un vehículo convencional, a metros de la playa de Getares y hasta un punto determinado donde se almacenará la droga hasta su posterior distribución a diferentes países de Europa.