Construir un refugio para las mujeres más vulnerables. Este es el propósito de trabajo de la Fundación de Solidaridad Amaranta, especializada en atender a mujeres en situación de prostitución y víctimas de la trata, tratando de mejorar su situación y calidad de vida. Fundación Amaranta surge de la obra social de las religiosas adoratrices puesta en marcha hace 14 años y que desde el pasado 2016 desarrolla su actividad en Algeciras.
Amaranta comenzó su trabajo en esta ciudad tutelando un piso de emergencias para mujeres víctimas de la trata. Más tarde centró su actividad en el CIE (Centro de internamiento de extranjeros), desarrollando talleres de información, asesoramiento y detección de posibles casos de trata. En julio de 2017, tras la decisión del Gobierno de que las mujeres migrantes no ingresaran en los CIE, impulsaron un centro de apoyo social en el barrio de La Caridad. "Aquí trabajamos con todo tipo de mujeres en situación de riesgo, en exclusión social, mujeres migrantes, en situación de prostitución y víctimas de la trata", explica a este medio Susana Pérez, técnica de intervención social que, junto a su compañera Ilargi Mayor, sacan adelante el trabajo de Fundación Amaranta en Algeciras.
Dos premios al Valor Social, 190 mujeres atendidas
Fundación Amaranta fue galardonada en 2018 y 2019 con los premios al Valor Social de la Fundación Cepsa, atendiendo entre un proyecto y otro a 190 mujeres en situación de riesgo; 70 de ellas están en situación de prostitución y el resto son mujeres migrantes. También han atendido a mujeres de otros puntos de la comarca como La Línea.
Mientras que la dotación recibida el primer año por parte de Fundación Cepsa fue invertida en mejorar el equipamiento del centro social de La Caridad, el segundo premio se ha destinado este año a un trabajo más de calle. "El primer premio nos permitió sostener el local. Hicimos también distintas actividades de ocio y tiempo libre con nuestras mujeres. Este año volvimos a concursar y en esta segunda fase estamos centrándonos en un trabajo más de calle, de salir a la calle y hablar con las mujeres en situación de prostitución". Así, se han distribuido folletos de prevención de la salud, informando acerca de los recursos sociales disponibles y repartiendo también kits para el autocuidado personal. Amaranta, dentro del programa 'Acercamiento', sale a la calle una vez a la semana por la noche, visitando a las mujeres en situación de prostitución, distribuyéndoles preservativos, asesorándolas y acompañándolas emocionalmente.
En otro de sus proyectos en ejecución, en 'Atención y acogida territorial', prestan una atención más personal e individualizada. "Tratamos de ayudar a todas las mujeres que llegan a nuestro centro con una demanda concreta, desde arreglar los papeles del médico, a un tema de residencia o de regularizar su situación, por ejemplo", añade Susana Pérez, técnica de intervención social de la fundación. Amaranta realiza además periódicos talleres de idiomas y cuenta con casas de acogida para mujeres en situación de prostitución o riesgo de exclusión.
"Trabajamos mucho en la promoción de derechos y el tema de la confianza, en crear un espacio seguro donde estas mujeres se sientan en confianza, sin sentirse juzgadas ni nada, dinamizando el centro para que lo sientan como propio. Aquí vienen mucho por las mañanas a pedirnos preservativos, se sientan a charlar y tomar un café por ejemplo", detallan desde Amaranta, que se propone seguir desarrollando más actividades tanto dentro como fuera de su centro.
