El Coral deteriorado de Algeciras

Francis Mena
Periodista
31 de Enero de 2021
B43F832B-B09D-4F06-AA12-F45CB75C1222
B43F832B-B09D-4F06-AA12-F45CB75C1222

Dejando la avenida Villanueva, en un lateral del antiguo Hotel Anglo-Hispano, hoy convertido en el Consulado de Marruecos, subimos a una Algeciras diferente, de otro tiempo, por una calle de adoquines desempedrada, llena de hierbajos y suciedad, cuyo zigzag acaba en la Plaza del Coral. En el Catálogo del Plan General de Ordenación Urbana de Algeciras, la zona, aparece con una protección de grado 4, sin embargo, su aspecto parece lejos de algo protegido. Los pocos habitantes que quedan en lo que en otro tiempo fue un animado patio de vecino, denuncian que "las casas abandonadas se caen a pedazos", "las ratas y las serpientes campan a sus anchas" y, además, actos vandálicos y de reformas han acabado con buena parte de los elementos ornamentales que embellecían este rincón de la Villa Vieja, que espera una inversión ya incluida en los presupuestos de 2021 de unos 300.000 euros y un proyecto que pretende poner en valor un lugar que podría ser, como otros tantos en la ciudad, digno de visitar. Hoy, desde luego, no lo es.

La conocida como Puerta del Mar está presidida en lo más alto de su arco por la Virgen de la Palma, patrona de la ciudad. El historiador Agustín del Valle nos muestra cómo alguien ha lanzado piedras sobre ella; la prueba del "delito", un canto de considerable tamaño, se ha quedado en la hornacina a los pies de la figura, que no ha sufrido daños importantes. Mientras, Del Valle nos explica algunos de los elementos rotos o directamente desaparecidos, como son unos azulejos que representaban unos músicos, se acerca una mujer de avanzada. "¿Quieren ustedes algo?", pregunta desconfiada. Explicamos que estamos haciendo un reportaje sobre la zona y los actos vandálicos que sufre desde hace años, y se lanza: "Esto está abandonado, mire cómo está todo esto", comenta, mientras muestra una Plaza del Coral llena de boquetes, tejas por los suelos y trozos de casas abandonadas que han caído. "Cualquier día pasamos por aquí y se nos cae encima", repite temerosa.

La Puerta del Mar está presidida en lo más alto de su arco por la Virgen de la Palma, patrona de la ciudad. Foto: Agustín del Valle.

Aunque prefiere no dar nombre, explica que actualmente tras la Puerta del Mar, en la plaza del Coral, viven ella y su hija, que también lamenta el estado de la zona. En ella llegaron a vivir más cincuenta personas que se han ido yendo, algo mas abajo quedan algunos vecinos más. "Nos dicen que no se puede cerrar porque es una calle pública, que es una zona para visitar, pero aquí qué van a visitar, casas que se caen y ruina", comenta la hija, que se queja de que "por la noche es una feria de gente que entra y sale", que siente inseguridad y que por eso tiene a un perro, que no deja de ladrar durante toda la conversación. Aseguran madre e hija que tienen que pintar su casa "cada tres meses por la humedad", y que han pedido al Ayuntamiento que se desbroce la zona y que fumiguen "porque aquí sufrimos plagas" en verano.

Denuncian también que tiraron un muro adosada al Consulado de Marruecos durante las reformas del edificio. Agustín del Valle lo confirma y muestra unas fotografías con este muro adornado por una hilera de azulejos, que continuaban al otro lado de la puerta. "Yo vengo mucho por aquí porque me recuerda al Albaicín de cuando yo vivía en Granada y estaban los azulejos con dibujos de músicos, se supone que tocaban para adorar a la Virgen pero un día vine y no estaban, los habían quitado, roto. Aquí había macetas, jarrones, también un antiguo aljibe que proporcionaba agua a los vecinos y que actualmente está tapado", relata entre la puerta y la calle Cervantes, a cuyo letrero le falta la primera 'e' y la 's' final.

Elementos perdidos del Patio del Coral. Fotos Juanjo Rivera.
Mosaicos perdidos del Patio del Coral. Fotos: Agustín del Valle.
Mosaicos perdidos del Patio del Coral. Fotos: Agustín del Valle.
Mosaicos perdidos del Patio del Coral. Fotos: Agustín del Valle.
Elementos perdidos del Patio del Coral.

Un proyecto de puesta en valor

El catálogo urbanístico describe la Plaza del Coral como "un reducto separado de los alrededores por escaleras y callejones, dentro de la Villa Vieja", como se le conoce a la parte que ocupaba la zona sur del Río de la Miel camino de su desembocadura y hoy sepultado, y que contaba con una antigua mezquita medieval. El propio catálogo califica de "obligada" la conservación de pavimentos, muros de rampas y puerta, y también permite la reforma y adecuación de viviendas existentes sin aumento volumetría. Recomienda la rehabilitación integral con eliminación de elementos inadecuados, así como la integración de su entorno, mientras que prohibe excavaciones sin control arqueológico, o la alteración de la puerta, muros y rampas.

En enero de 2019, hace dos años, el Consejo de Gestión de la Gerencia de Urbanismo, dio la aprobación definitiva al estudio de detalle para la Plaza del Coral, que suponía un nuevo avance para la planificación y desarrollo urbanístico de esa zona. La empresa Metrovacesa tiene prevista la construcción de viviendas, así como actuaciones para preservar los elementos protegidos, dentro de las obligaciones que se derivan del propio estudio de detalle.

El pleno extraordinario de la Corporación Municipal, reunido el martes 29 de diciembre de forma telemática bajo la presidencia del alcalde, José Ignacio Landaluce, dio el visto bueno a los presupuestos para 2021 en los que se recoge una inversión de 300.000 euros para el arreglo del Patio del Coral, que espera como agua de mayo esas inversiones para volver a lucir.