El alcalde de Castellar de la Frontera, Adrián Vaca, junto a la primera teniente de alcalde, Victoria González, han trasladado este mediodía a la presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor, la inquietud de los chisparreros por la instalación de una infraestructura fotovoltaica que proyecta Cepsa.
Vaca ha trasladado a Corredor la preocupación del Ayuntamiento y la de los agricultores locales por las previsiones de instalar placas fotovoltaicas en municipios colindantes que, a juicio del consistorio chisparrero, perjudicaría a la zona agrícola de Castellar. El alcalde ha explicado que "hemos entregado un dossier en el que le trasladamos nuestra opinión. Deben buscarse alternativas. Le pedimos que lo revise, que lo mire. Si se desarrollan esas líneas eléctricas podría perjudicarse a los agricultores. Los jóvenes agricultores se están incorporando a esas tierras, son parcelas pequeñas que podrían tener un perjuicio y se han realizado inversiones para seguir generando actividad. Los aguacates y naranjas son de los mejores del país y hay que seguir defendiendo el campo", ha expuesto Vaca. El Ayuntamiento de Castellar presentará alegaciones y recursos a las declaraciones de utilidad y autorización administrativa previa para forzar un cambio de ubicación y trazado. Desde el Ayuntamiento agradecen la atención de la presidenta de Red Eléctrica y esperan tratar el asunto con mayor profundidad.
Cepsa proyecta la construcción de una planta solar fotovoltaica de 171,81 hectáreas de expansión y 200 megavatios de potencia en el municipio de San Roque. Un proyecto que, con una inversión de 92,6 millones, y atendiendo a la aspiración de esta compañía de impulsar las energías renovables (la filial Mitra Alfa S.L.U. sería la promotor de esta instalación), por el momento, se ha encontrado con la oposición del alcalde Adrián Vaca, de Castellar de la Frontera, término municipal vecino que se vería afectado por esta infraestructura, y que hoy ha mantenido un breve encuentro con la presidente de Red Eléctrica de España, Beatriz Corredor, para trasladarle las inquietudes de la ciudadanía local al respecto de este proyecto, especialmente la del sector agrícola. La presidenta de REE, que esta mañana se ha reunido con el alcalde de La Línea, Juan Franco, para abordar el proyecto de construcción de una subestación eléctrica en el paraje de Los Portichuelos, se reunirá esta tarde también con el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix.
Por el momento se desconoce el contenido de este encuentro entre la presidenta de Red Eléctrica y el alcalde sanroqueño, aunque posiblemente incluya en algún punto este nuevo proyecto que se sumaría a la lista de infraestructuras industriales que ya soporta este municipio.
El Boletín Oficial del Estado recoge, en su edición del pasado jueves 11 de marzo, un anuncio del área de industria y energía de la subdelegación del Gobierno en Sevilla por el que se somete a información pública la solicitud de autorización administrativa previa, autorización administrativa de construcción, declaración de impacto ambiental y declaración de utilidad pública de la planta solar fotovoltaica denominada 'FV Sancho' de 200 megavatios, así como de la infraestructura de evacuación de una subestación eléctrica transformadora denominada 'SET Sancho', con una línea eléctrica mixta, aérea y subterránea, que conectaría con la subestación de Guadarranque, en Castellar de la Frontera.
La planta fotovoltaica que se proyecta, junto a su infraestructura de evacuación, su subestación transformadora y su línea de evacuación, estarán ubicadas en los términos municipales de San Roque y Castellar de la Frontera, reuniendo una serie de características como la expansión de 171,81 hectáreas (superficie total delimitada por el vallado), una potencia de 200 megavatios, 396.032 módulos y una inversión de 92,6 millones (84.991.105 euros para la construcción de la instalación fotovoltaica, 3.570.682 para la subestación eléctrica transformadora y 4.064.928 euros para la línea de evacuación mixta, área y subterránea, con origen en la planta solar fotovoltaica 'FV Sancho', en San Roque, y final en la subestación colectora Guadarranque, en Castellar de la Frontera). El objetivo de este proyecto, según recoge la documentación oficial publicada en el BOE, es la "generación de energía eléctrica de origen renovable para su comercialización en el mercado libre y cumplir los objetivos marcados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC 2021-2030)".