"El puerto de Algeciras es el único del mundo que yo conozca, y sobre todo de los alrededores, que no le ha negado la entrada a ningún buque por el Covid". Julio Berzosa, capitán marítimo de Algeciras, ha defendido esta semana en Algeciras la labor realizada durante todo este último año y medio por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, que "ni en los peores momentos de la Covid-19 llegó a decirle a ningún barco con marineros enfermos usted aquí no entra. Otros puertos cercanos sí lo hicieron".
Berzosa realizó estas manifestaciones durante un acto organizado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), a través de la Dirección General de la Marina Mercante, en homenaje a la gente de mar, cuyo Día Internacional se celebra este 25 de Junio, según decretó en su día la Organización Marítima Internacional (OMI).
El capitán marítimo de Algeciras también quiso agradecer la labor desarrollada en este ámbito por Sanidad Marítima, y, muy especialmente, al doctor Antonio Bermejo, porque "nunca se negaron a ir a bordo" de los buques que llegaron a encontrarse en esa situación. Asimismo, Berzosa mostró su agradecimiento a Sanidad Exterior y a la Guardia Civil, y alabó el trabajo "encomiable" desarrollado por los prácticos, que metieron esos barcos para atraque o fondeo "con sus equipos de protección, y que tampoco negaron ayuda ninguna".
En cuanto a la propia Capitanía Marítima, Berzosa comentó que se han venido cumpliendo las directrices que marca la OMI y la Dirección General de la Marina Mercante y, al mismo tiempo, junto con la APBA, "empujando un poquito a favor para meter el buque y darle un tratamiento sanitario al que lo necesita".
"Muchísimos buques", con la atención sanitaria necesaria
Tras detallar el procedimiento que se ha venido siguiendo en esos casos, con cuarentenas a bordo o en tierra para aquellos tripulantes que no necesitaban traslado al hospital, Berzosa recordó que la pandemia, la propagación de "un bicho que nos está tambaleando a todos", no hizo sino empeorar los peligros a los que ya habitualmente se enfrenta la gente de mar, y que "son de sobra conocidos".
Berzosa, que mostró gráficos con datos de algunos de los "muchísimos buques" con tripulantes enfermos de coronavirus a los que se dio atención durante 2020 y 2021, explicó también cómo se ha enfocado durante la pandemia la cuestión de los enroles múltiples, con el objetivo de hacer "compartimentos estancos". "Para evitar contagios del virus, cada buque debía tener su propia tripulación, sin tener que intercambiarse y mezclarse con las demás tripulaciones de los otros buques de la flota".
A la hora de poner ejemplos concretos de desembarcos de enfermos de Covid-19 a hospitales y estancias en tierra, el capitán marítimo de Algeciras relató el caso del buque 'Alis', el último por ahora atendido en Algeciras, y lo comparó con lo ocurrido con el 'Marella Dream', de armador alemán y gestion británica. "Este buque, en un episodio anterior al nuestro se presentó cerca de Gibraltar con un enfermo, y les dijeron ya estudiamos el caso y mañana os damos la respuesta. Llegó la noche y el enfermo murió, y el buque se tuvo que ir a Málaga a evacuar el cadáver", lamentó Berzosa.
En lo que respecta al 'Alis', que se presentó por el dispositivo de no separación de tráfico, había dejado un fallecido en Motril y dos enfermos de Covid, y de allí acudió a Gibraltar a repostar combustible, pero "no les atendieron, el practicaje se lo hicieron a distancia, y de los enfermos no quisieron saber nada". Después de eso, continuó relatando Berzosa, fondeó en la Bahía de Algeciras, dándosele atraque por parte de la Autoridad Portuaria y siendo atendidos por Sanidad Marítima, realizándose también la correspondiente inspección, limpieza y desinfección del buque.
Salud, seguridad y "mucha empatía" para la gente de mar
"Yo para el futuro de la gente de mar quiero salud, seguridad y mucha empatía, y que nos pongamos enla situación del que está a bordo", comentó el capitán marítimo de Algeciras, recordando también su propia experiencia personal. "Yo he navegado poco, pero navegué, bajé a Nigeria y estuve allí sin poder salir. Y son meses, y meses, y meses confinados en un espacio, y ahora encima con la pandemia ya no se trataba de estar confinados en el buque, sino que tenían que estarlo en sus camarotes, y con la comida por debajo de la puerta".
En cuanto al trabajo realizado por quienes se suben al bordo de cualquier buque, con Covid o sin él, como los inspectores de Capitanía Marítima, Julio Berzosa recordó las numerosas situaciones de riesgo que se corren, y los "peligros inherentes al trabajo laboral marítimo".