Vuelve este agosto la cita astronómica más esperada: las lágrimas de San Lorenzo, también conocidas como Perseidas. Esta cita promete un espectáculo de luces que puede apreciarse en su máximo esplendor por la noche, con unos 200 meteoritos la hora, desde una zona alta con poca contaminación lumínica. Perdurarán hasta el 24 de agosto.
Esta lluvia de 'lágrimas' se produce por el cometa Swift-Tuttle, en el hemisferio Norte, cuando cada año la Tierra pasa por una nube de polvo que desprende el cometa al acercarse al Sol. Recomiendan disfrutar del fenómeno entre las 22:00 y las 23:00 horas.
Las Perseidas son partículas que deja este cometa a su paso cuando se acerca al Sol, entran en contacto con la atmósfera y se produce el efecto que conocemos como estrellas fugaces. Estos cuerpos celestes reciben nombre de Perseidas por su origen, en la constelación de Perseo.
También llamadas Lágrimas de San Lorenzo por su proximidad con el día de San Lorenzo, celebrado el 10 de agosto. Al ser un acontecimiento nocturno, hay quien asocia las 'Lágrimas' a las que derramó el santo al ser quemado en la parrilla.