Hoy, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Ayuntamiento de La Línea de la Concepción ha inaugurado en el parque Princesa Sofía el Jardín Violeta, en torno a un monolito con el símbolo femenino en homenaje a las víctimas de violencia de género. El acto ha tenido un marcado carácter participativo como forma de evidenciar la unidad de acción de toda la sociedad frente a las agresiones machistas.
La materialización del Jardín Violeta ha sido una iniciativa de la delegación de Igualdad, en colaboración con Fundación Cepsa, que aportó el monolito, y las concejalías que Parques y Jardines, Mantenimiento Urbano y Cultura, para el diseño y ejecución del espacio, en el que también se incluyen dos bancos pintados por los artistas Pepe Cano y Francisco Galeote.
El alcalde abrió el acto recordando la necesidad de tomar conciencia “ante las situaciones tan desagradables que vivimos con la violencia de género y otras situaciones por no tener interiorizado qué es la diversidad y la igualdad”. El regidor agradeció la presencia de entidades representativas de la ciudad, de ámbitos como la docencia, las fuerzas de seguridad y la ayuda social, así como gran parte de la corporación municipal, por lo que declaró estar “muy contento de tener esta unidad de acción”.
La concejal delegada de Igualdad, Zuleica Molina, recordó a las 37 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año, la última de la vecina ciudad de San Roque, y remarcó que el jardín violeta y el monolito a las víctimas son un recordatorio de la existencia de la violencia de género y un recuerdo a todas las víctimas de esta lacra. “Espero que sea un punto de referencia para que no se nos olvide que, por desgracia, tenemos esta situación que sigue ocurriendo y debe cesar”, señaló.
La concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Raquel Ñeco, el rincón inaugurado hoy “es resultado de la fusión del arte, la cultura y el medio ambiente con el objetivo de rendir homenaje a las víctimas. Un espacio lo más agradable posible dentro de la fealdad que tiene esta temática”.
Fotos: Rosario Pérez. 
La responsable de Fundación Cepsa, Estrella Blanco, explicó que la entidad decidió apoyar esta iniciativa municipal coincidiendo con el Ayuntamiento en su “apuesta porque todos colaboremos para construir una sociedad en igualdad, en la que las mujeres no tengan miedo. Ojalá este monolito que se inaugura hoy sirva no solo para recordar a las víctimas de violencia de género, sino también sea un recordatorio constante de que, entre todos, tenemos que acabar con la violencia y los asesinatos machistas”, manifestó.
A continuación, la directora del del IES Virgen Esperanza, Ana Belén García, único centro que imparte el Ciclo Formativo Superior en Promoción de la Igualdad de Género, señaló la importancia de educar a la sociedad para prevenir este tipo de la violencia. Según los datos que aportó, una de cada tres mujeres sufre violencia de género a lo largo de su vida y 1.118 mujeres han sido asesinadas por este motivo en España desde 2003. “Es una gran pandemia, desgraciadamente invisible y tampoco tenemos vacunas, ni paliativos”. Desde el instituto se pone en marcha un proyecto denominado “Plántate”, con el doble significado de plantarle cara a la violencia y de renacer “con una savia nueva”, propugnando levantar la voz “porque el silencio alimenta al verdugo”, finalizó. Tras su intervención, la jefa del departamento, Clara Nuria Casquero, y el profesor del centro, Alberto Castellano Barragán, dieron a conocer el cartel elaborado por la artista, Lola Gento, en el que aparece una espalda de mujer llena de arañazos, en una composición que simboliza darle la espalda a la violencia, y presentaron a Manuela Saborido Muñoz, conocida por “Manolita Chen”, llegada desde Arcos de la Frontera para amadrinar el proyecto. Saborido, que durante muchos años ha sufrido el maltrato de toda una sociedad por su condición de mujer transexual, abogó por denunciar como forma de defensa, y por “el amor y la comprensión” hacia todas las personas.
Tras esta intervención, dos alumnos del Conservatorio Profesional de Música Muñoz Molleda interpretaron a la guitarra la nana de Nikita Koshkin, Berceuse y una versión de No surprise, de Radiohead. A continuación se escenificó una performance sobre la violencia hacia las mujeres a cargo de un grupo de alumnas de Promoción de la Igualdad de Género. Zuleica Molina puso fin al acto agradeciendo su implicación a todas las personas que han colaborado y asistido al acto de hoy.