"Confiemos en que se llegue pronto a una normalidad, que el Gobierno trate de solucionar la subida del gasoil y el paro del transporte lo antes posible, porque esto lo que trae es ruina a muchos pequeños empresarios y muchos autónomos, que aún nos estábamos recuperando de la pandemia y ahora tenemos que estar otra vez afrontando pérdidas... Que se tomen ya cartas en el asunto porque somos los que damos vida a las ciudades y creamos empleo, aguantando contra viento y marea, y nos tienen acribillados a base de impuestos".
Juan Cánovas, portavoz de los pescaderos de la cuesta Rafael del Muro, en las inmediaciones del mercado Ingeniero Torroja, asegura que en el sector están "muy preocupados" por la deriva que está tomando la situación del abastecimiento, tras el encarecimiento de los combustibles y el paro indefinido que secundan desde el lunes buena parte de los transportistas de mercancías por carretera.
Según nos cuentan estos comerciantes, en los primeros días de la semana no notaron mucho la incidencia de la huelga en el transporte, pero conforme han ido pasando los días sí que se han empezado a apreciar las primeras consecuencias de la situación de desabastecimiento en que se encuentran algunas lonjas de Andalucía. Cada vez es más difícil que salgan productos pesqueros de los propios puertos, y a ello hay que sumar que cada vez son más los barcos que no están faenando, por las subida en el incremento en el precio del gasoil.
De cara al fin de semana, los pescaderos temen que ya empiecen a escasear productos. "Estamos llegando al viernes y cada vez cuesta más trabajo que la mercancía llegue aquí al Campo de Gibraltar, y no sólo por el paro que están haciendo muchos camioneros, pequeños empresarios y autónomos que están luchando por su bienestar, sino también porque buena parte de la flota está ya amarrada en los puertos y las embarcaciones no están saliendo a faenar", explica Cánovas.
Según detalla el portavoz de esta asociación de comerciantes, a los vendedores de pescado les está afectando ya el amarre de flotas importantes de la provincia, como las de Barbate, el Puerto de Santa María o Sanlúcar de Barrameda, pero los problemas de abastecimiento se están notando aún más en la venta del marisco. "Todo el marisco de concha que nos viene del norte, las ostras, las almejas... todo eso está dejando de llegar porque los camiones no se atreven a salir a las carreteras, para no encontrarse con piquetes que les puedan ocasionar un perjuicio".
Los pescaderos confían en que no tarde mucho en encontrarse una solución a toda esta problemática, y que está añadiendo más incertidumbre a un sector ya de por sí castigado por los efectos de la pandemia, el empobrecimiento de muchas familias y los cambios en los hábitos de consumo, que provocan que cada vez resulte más difícil que los mercados tradicionales puedan competir con los hipermercados y los centros comerciales.
En este sentido, el portavoz de los pescaderos de Rafael del Muro se mostró tajante, y animó a la población a consumir más en los mercados. "Al mileurista ya no le llega para vivir, ya pasaba antes y ahora con estas subidas que estamos viviendo más todavía, y hay gente que no viene más a menudo a comprar productos frescos de carne, fruta o pescado porque no le da para el sueldo para llegar a fin de mes. Pero no siempre las grandes superficies ayudan al consumidor a llenar una cesta de la compra más económica, y menos cuando en situaciones de crisis se juega con los precios para obtener beneficios, como hemos podido ver que ha pasado con el aceite de girasol, que cuesta ya casi 3 euros el litro", advirtió.