El ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo, ha comparecido hoy en el parlamento gibraltareño para dar explicaciones de las negociaciones en curso para establecer un tratado entre el Reino Unido y la Unión Europea sobre la futura relación de Gibraltar con la Unión Europea. Hasta la fecha ha habido ocho rondas de negociaciones y Picardo prevé que probablemente se necesite "dos rondas más de negociación formal, como mínimo". "La primera es probable que se celebre a principios de junio si las partes acuerdan las fechas adecuadas", ha asegurado. Picardo se ha mostrado optimista: "Estamos a un paso de un tratado histórico".
Picardo ha dicho ante la cámara que "la complejidad de esta negociación es, francamente, inimaginable". "Los tratados de la UE, como bien saben todos los juristas de la UE, son todos muy detallados y complejos", ha añadido el primer ministro, que ha informado que se están "tocando todos y cada uno de los aspectos de los elementos básicos de la Unión Europea y considerando si cada uno de ellos debe aplicarse a Gibraltar en el futuro y, en caso afirmativo, cómo".
Además, Picardo ha reconocido que "tenemos la suerte de contar con un gran equipo de la Comisión Europea al otro lado de la mesa". "Clara Martínez Alberola dirige un equipo comprometido con el que disfrutamos trabajando, incluso cuando inevitablemente no estamos de acuerdo en las muchas formas de decir o hacer lo mismo. Al fin y al cabo, en eso consiste una negociación de buena fe", ha añadido.
PROGRESOS
"En cuanto al progreso de las conversaciones, puedo informar hoy a la Cámara de que la considerable y positiva interacción de las últimas cuatro semanas nos ha llevado a estar muy satisfechos con el punto en el que nos encontramos", ha comentado el ministro principal. Sin embargo, ha reconocido que "nada está acordado hasta que todo está acordado y en este momento aún no podemos decir que hayamos acordado ningún texto". Eso sí, Picardo ha apuntado que "En muchos ámbitos, ya se ha llegado a un acuerdo en torno a los principios básicos para llegar a un acuerdo completo".
Los ámbitos que han quedado más abiertos en principio se refieren a los aspectos de la movilidad de las personas y a los aspectos de la movilidad de las mercancías. La cuestión principal se ha centrado en la movilidad de las personas. "La clave ha sido resolver cómo podríamos hacer efectivas las disposiciones prácticas necesarias que surgirán del delicado equilibrio alcanzado en el Acuerdo de Nochevieja", ha comentado durante su comparecencia en el parlamento.
"España es el Estado miembro vecino y, hoy en día, ya es responsable de los controles de Schengen cuando las personas tratan de entrar en Schengen a través de Gibraltar en la frontera entre Gibraltar y España en La Línea. Por lo tanto, acordamos en el Acuerdo de Nochevieja, que ya debatimos en esta Cámara, que España tendrá la responsabilidad de los controles de Schengen cuando las personas entren en Schengen a través de los puntos de entrada en Gibraltar", ha explicado Picardo. "Al menos durante los primeros cuatro años, llevará a cabo esos controles con la ayuda de Frontex", ha anunciado.
La cuestión, sin embargo, es cómo hacerlo de forma segura y aceptable para Gibraltar, el Reino Unido, España y la UE desde el primer día, según el gobierno gibraltareño. "Por supuesto, tenemos que lidiar con los muchos años de disputas y restricciones, etc., mientras evaluamos las posiciones de cada uno. El lugar y la forma de realizar los controles de Schengen ha sido una cuestión clave durante toda la negociación. Eso significa trabajar para acordar en detalle dónde se ubicará al personal pertinente, qué hará y a quién se lo hará", ha detallado Picardo. "La clave, sin embargo, es que no habrá tales controles en la frontera entre nosotros y España. Es decir, que donde se realizan actualmente los controles, no los habrá", ha ahondado en este apartado, uno de los importantes en las negociaciones y en el posible futuro acuerdo. Con ello se acabarán para siempre, al menos durante el periodo de aplicación del Tratado, las colas y los controles fronterizos tal y como los conocemos hoy.
"Por supuesto, también queremos que estas cuestiones no creen cargas adicionales innecesarias para los pasajeros que llegan al aeropuerto y al puerto de Gibraltar. Así que estamos trabajando muy duro para conseguirlo", se ha referido de nuevo a la complejidad de la negociación.
Picardo, ante las posibles acusaciones de falta de trasparencia, ha afirmado que "no podemos hacer es negociar en público". "No podemos entrar en más detalles porque queremos dar la oportunidad de finalizar este acuerdo de la mejor manera posible", ha defendido el ministro principal.
SITUACIÓN ACTUAL
"La respuesta directa es que estamos a un paso de un tratado histórico", ha contestado el ministro principal sobre el estado actual del posible tratado entre el Reino Unido y la UE. "Un tratado que, si lo conseguimos, creará un renovado optimismo en la propia idea europea", se ha mostrado optimista. Considera que este nuevo panorama "creará una oportunidad para nuestro mayor desarrollo económico y el mayor desarrollo económico de la región que nos rodea, y quizás incluso más allá, llegando al otro lado del estrecho".
"Porque quiero dejar claro que la prosperidad compartida de la que hablamos tiene que ver con el desarrollo empresarial, no con que Gibraltar pague por la creación o el mantenimiento de las infraestructuras españolas", ha declarado sobre los futuros acuerdos.
FUTURO BRITÁNICO
"El futuro de Gibraltar es exclusivamente británico", ha sido otras de las firmes sentencias de Fabián Picardo en su comparecencia en el parlamento. "Nada en las negociaciones ha puesto esto en duda ni ha cuestionado ninguno de los principios básicos de la soberanía británica sobre Gibraltar", ha insistido.
"Como dijo el ex secretario de Estado español para Europa, Mario Aguiriano, los negociadores españoles saben que, si plantean la cuestión de la soberanía de Gibraltar, el Reino Unido y Gibraltar simplemente abandonarán la sala de negociaciones", ha recordado Picardo, que ha añadido: "No hemos cerrado nuestras carpetas ni nos hemos levantado de la mesa porque no se ha planteado ni se nos ha pedido tal cosa". "Nada nos arrancará jamás de Gran Bretaña", ha sentenciado.