OPE, Mercadillo y Feria: la odisea de aparcar en el Llano Amarillo

16 de Junio de 2022
El Llano Amarillo, cerrado parcialmente para aparcar.
El Llano Amarillo, cerrado parcialmente para aparcar.

Algeciras vive un mes de junio intenso en cuanto a eventos se refiere. La ciudad anda inmersa tanto en la Feria Real como en la Operación Paso del Estrecho y eso trae consigo muchos beneficios, pero también aspectos que perjudican, en este caso, a la población. Nos referimos, concretamente, al aparcamiento en el Llano Amarillo, el balón de oxígeno con el que cuenta la ciudad para aparcar y que en esta época se convierte en una auténtica odisea.

Un Llano Amarillo que, en estos momentos, ya se encuentra cerrado casi en su totalidad. O, mejor dicho, reservado. Es decir, en estos días solo está abierto para uso público el vial de entrada en el que hay aparcamientos a izquierda y derecha. La ciudad del feriante y la OPE, además del Mercadillo los martes, convierten las escasas plazas de aparcamiento en un bien muy preciado.

El número de plazas se ve reducido de manera importante en estas fechas y eso trae consigo más de un quebradero de cabeza para la población. Un problema que se agrava los martes con la instalación del tradicional mercadillo. El Parque Feria, lugar donde cada semana se instala el popular mercadillo, está ocupado desde hace algunas semanas por la instalación de la feria, lo que obliga a su traslado al Llano como ya sucedía antes de la pandemia.

El Llano Amarillo, cerrado parcialmente para aparcar.

A todo ello hay que sumar el inicio de la Operación Paso del Estrecho -por la que se prohíbe el aparcamiento en una de las zonas del Llano entre el pasado 15 de junio y hasta la finalización de la misma- y la tradicional Carrera Popular del Estrecho, un clásico al inicio de la semana grande algecireña. Con este evento, tal y como informan desde la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras (APBA), se cierra una de las zonas del Llano, que ya no se vuelve a abrir para la población en general hasta que concluya la OPE.

Toda esta situación provoca serias dificultades a la hora de buscar aparcamiento para acudir al trabajo, al centro o para cualquier gestión que se requiera. Una disyuntiva que no se vivió durante los años de la pandemia, pero que con el retorno de la normalidad vuelve a hacer acto de presencia en Algeciras, poniendo a prueba la paciencia de sus vecinos.