Alumnado del instituto Virgen de la Esperanza de La Línea se ha concentrado este lunes en la Plaza de la Constitución, con el apoyo de una representación de padres y madres y miembros del sindicato CGT, para reclamar el arreglo inmediato del gimnasio de este centro educativo, que permanece clausurado desde el pasado curso por la presencia de amianto en la cubierta de esta instalación deportiva.
"Amianto no. Queremos un gimnasio. Amianto fuera", han sido algunos de los lemas coreados por los jóvenes, que han denunciado a este medio que el gimnasio de este centro permanece cerrado desde el curso pasado. "El techo es cancerígeno y no está en buenas condiciones, así que lo cerraron. En lugar de arreglarlo lo cerraron. Tampoco disponemos de vestuarios, somos uno de los pocos institutos que no tenemos vestuarios para después de las clases de educación física poder asearnos un poco. El patio también se encuentra en muy malas condiciones", señalan algunos de los alumnos afectados.
Según exponen, estaba previsto que el amianto del gimnasio fuese retirado este verano. Algo que no ha sucedido así finalmente. Anuncian más protestas. "Haremos lo que tengamos que hacer para encontrar una solución a este problema. Si se quiere, se puede". Reclaman un mayor apoyo del profesorado y la dirección del centro. El profesor de Educación Física, que según comunican estos jóvenes les ha mostrado su respaldo, no ha acudido a la concentración de este lunes, en la que sí han participado algunos padres y madres. "El centro necesita muchas mejoras, tanto en el gimnasio como en el patio. Ya es hora y los responsables tienen que ponerse a ello", apuntaba una de las madres.
El amianto es uno de los componentes del fibrocemento, un material de construcción. Está compuesto por fibras microscópicas que pueden permanecer en el aire el tiempo suficiente para que supongan un riesgo respiratorio. Su venta y uso está prohibo en España desde 2001.
El mantenimiento de los centros de Enseñanza Secundaria son competencia de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía. No obstante, desde la delegación de Educación del Ayuntamiento de La Línea muestra, su respaldo a la comunidad educativa del IES Virgen de la Esperanza. "Apoyamos sus reivindicaciones y esperamos que tengan una pronta solución en pos de la calidad de la enseñanza y del bienestar del alumnado. Ofrecer la colaboración, en la medida de las posibilidades, en cualquier actuación que podamos ser de ayuda a todo el colectivo afectado", ha compartido con este medio Sebastián Hidalgo, concejal delegado de Educación.
Situación actual del IES Virgen de la Esperanza:
Por su parte, desde la dirección del centro señalan que "este equipo es el primero en velar, exigir y reclamar por la seguridad de toda nuestra comunidad educativa así como por la mejora y calidad de nuestra práctica educativa".
Igualmente, explican que las actuaciones correspondientes al lucernario o claraboyas de iluminación del pasillo central y la estructura del pasillo entre ESO y Bachillerato ya se encuentran finalizadas. Sin embargo, "los trabajos en las cubiertas de talleres de automoción y de las instalaciones deportivas no se correspondieron con las actuaciones que se han solicitado desde el centro en múltiples ocasiones durante los últimos años, ni tampoco se recibió más información al respecto", exponen desde la dirección.
Respecto a las instalaciones deportivas, la Agencia Pública de Educación ha informado, según informan desde la dirección del centro, de la puesta en marcha de un nuevo proceso de licitación pública para los trabajos pendientes. Según la última comunicación recibida hace unas semanas, una vez desvinculada la tarea de retirada de amianto de anteriores adjudicaciones, el nuevo proceso de licitación se encuentra todavía en trámite administrativo, por lo que se espera sea adjudicado en breve y los trabajos se retomen lo antes posible.
Respecto a los talleres de automoción, se ha podido adjudicar su impermeabilización a una empresa local mediante un contrato menor. El presupuesto de estos trabajos fue aprobado en junio por el Consejo Escolar y, gracias a los fondos remanentes asignados al centro (procedentes de la paralización de diversos trabajos de mantenimiento externo durante los últimos cursos, debido a la situación sanitaria), se han podido ejecutar durante el verano, estando prácticamente finalizados a día de hoy.