El abogado de Yassine Kanjaa: "No merece prisión, sino internamiento en un centro psiquiátrico"

La defensa pide la absolución del asesino de Diego Valencia en Algeciras, alegando que durante los hechos sufría un brote de esquizofrenia paranoide que le impedía distinguir el bien del mal

Periodista
21 de Octubre de 2025
Visto para sentencia el juicio contra Yassine Kanjaa, autor del asesinato de Diego Valencia en Algeciras. Imagen: captura de pantalla de la cuarta sesión.

“No sabía discernir el bien del mal”. El juicio contra Yassine Kanjaa, autor del asesinato del sacristán de la iglesia de La Palma, Diego Valencia, y de las heridas causadas a varias personas en Algeciras en 2023, ha quedado visto para sentencia tras la última sesión celebrada este martes. Su abogado ha solicitado la absolución de la pena de prisión y su internamiento en un centro psiquiátrico, “donde no sea un peligro para él mismo ni para nadie, tanto tiempo como consideren los médicos”. Kanjaa se ha acogido a su derecho a no declarar, y al ser preguntado si deseaba añadir algo a los argumentos de su defensa, ha guardado silencio.

La Fiscalía solicita 50 años de prisión por los delitos de asesinato con alevosía del sacristán (25 años), tentativa de asesinato con alevosía al párroco (15 años) y lesiones a un tercer ciudadano (10 años), todos ellos con carácter terrorista y de inspiración yihadista. Los hechos ocurrieron el 25 de enero de 2023, cuando el acusado irrumpió armado con un machete en varias iglesias de la ciudad.

El abogado de Kanjaa, Francisco Andújar, pide que los delitos no sean considerados de terrorismo, sino como asesinato, intento de asesinato y lesiones, y que se le aplique una medida terapéutica de internamiento en lugar de prisión. “Lo mejor para Yassine es que esté internado, no preso. No creo que sea responsable penalmente; necesita tratamiento, no castigo”, ha defendido.

Última sesión del juicio contra Yassine Kanjaa, que ha quedado visto para sentencia. Foot: captura de pantalla.

Durante las anteriores sesiones, los testimonios y peritajes dejaron patente que Kanjaa tenía un objetivo definido y que se había preparado durante meses, autoinstruyéndose en el yihadismo y difundiendo contenidos de esta índole en redes sociales. No obstante, su defensa sostiene que padecía una enfermedad mental que le impedía comprender la ilicitud de sus actos.

“No merece una pena de prisión porque no sabía lo que hacía; consideraba que en la iglesia había brujería y envenenamiento de los alimentos”, ha sostenido Andújar, quien ha pedido la aplicación del artículo 20.1 del Código Penal, que exime de responsabilidad penal a quienes, por una alteración psíquica, no podían comprender la gravedad de sus actos.

El letrado ha insistido en que no existió una finalidad terrorista, aunque sí reconoce la comisión del asesinato. “Meses antes era una persona nada religiosa; luego tuvo una conversión, incluso extremadamente religiosa, pero como en cualquier otro culto. No podemos hablar de radicalización ni de defensa de postulados terroristas”, ha señalado.

El abogado de Yassine Kanjaa, Francisco Andújar.

Según los nueve peritos psiquiatras que lo evaluaron, Kanjaa no simulaba su enfermedad y se encontraba en pleno brote psicótico durante los hechos, convencido de que los sacerdotes practicaban brujería y envenenaban la comida.

Por todo ello, la defensa insiste en que no era consciente de la gravedad de los hechos y solicita su internamiento en un centro psiquiátrico hasta que los médicos determinen que su dolencia está curada y ya no suponga un peligro para sí mismo ni para los demás.

El acusado, preguntado al finalizar la vista si quería añadir algo, ha declinado hacerlo. El juicio ha quedado visto para sentencia.