Ana Belén Bernal, madre de cuatro hijos, ha sido desahuciada esta mañana de la vivienda de alquiler en la que se encontraba junto a su madre, Esperanza y su hermano, José Manuel, que padece una minusvalía reconocida del 67 por ciento. La vivienda en la que residían ha quedado cerrada por el juzgado y agentes de la Policía Nacional en la calle Poeta Moñiz nº3 de Algeciras tras la denegación del recurso presentado el abogado de oficio de Ana Belén. "No tenemos adónde ir, no sé qué haremos", reconoce la afectada a este medio.
Tampoco la última prórroga de 15 días. Por su parte, Carmen Pérez, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, ha estado en contacto con la familia hasta el último momento ofreciéndole calor y apoyo, además de ayudándole en los trámites administrativos. Carmen Pérez se ha puesto en contacto para solicitar una prórroga de 15 días que no ha salido adelante. "El juez no ha considerado las circunstancias que tiene tanto de vulnerabilidad como de discapacidad, como de niños menores. El único ingreso que entra es de 400 euros. Hoy en día como está el alquiler es súper difícil que puedan encontrar una casa. Y en Servicios Sociales no hay una vivienda que se puedan adecuar a sus circunstancias ni hay vivienda que puedan pagar", recalca la portavoz de la plataforma.
Carmen Pérez no se ha separado en toda la mañana de Ana Belén y Esperanza, su madre. Pese a que finalmente han sido desahuciadas, la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca se encuentra ya haciendo trámites para buscarle una vivienda donde residir junto a sus cuatro hijos, su madre, y su hermano. "Al juez se le ha presentado un informe de vulnerabilidad extrema, tanto económica como social. Ella está separada, con cuatro menores, separada, 400 euros de pensión, sin ingreso mínimo vital, su madre mayor, su hermano discapacitado con un 67%", argumenta Carmen Pérez.
"Las viviendas del banco que se encuentras cerradas sin uso otorgárselo a Asuntos Sociales para dárselo a familias que están en umbrales de exclusión social. Nadie quiere ocupar la casa por la cara, por mucha ocupación ilegal que sea. Si le hubieran hecho un alquiler, seguramente hubiera contrarrestado ese alquiler, pero tampoco le han dado esa oportunidad. Esto es una vivienda que el banco no necesita para nada. Activos cerrados que se acumulan, se deterioran y se destruyen, mientras las familias están en la calle", apunta Carmen Perez, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca a 8Directo.
Ana Belén intentó paralizar el desahucio que ha tenido lugar este miércoles en la calle Poeta Moñiz nº3 de Algeciras presentando un recurso que ha sido denegado. No obstante, hace unos meses le confirmaron que el desahucio ha llevado a cabo y que "no opusiéramos resistencia". Confiesa a este medio que se encuentra "sin ánimos" aunque intenta mantenerse fuerte delante de sus cuatro hijos. "Estoy que no sé cómo tirar. Intento que no me vean mal, aunque llega un momento en que no puedo más. No quiero esta vida, solo una vivienda digna y que estén bien mis hijos", lamenta con tristeza en el tono de voz.
"Me metí en enero de la pandemia, era una vivienda que estaba vacía y que era del banco de un fondo buitre", recuerda la afectada. "Yo quería que me ofrecieran un alquiler social, algo que pudiera permitirme, un dinero que yo pudiera pagar. Lo que no puedo es pagar 500 euros. Sí puedo pagar un alquiler de 300. Yo trabajo limpiando y el padre de mi hijo, del que estoy separada, también aporta unos 400 euros, añade.
"Me gustaría que me ofrecieran un alquiler social, que era lo que buscaba. Me ofrecieron dinero para irme pero no he querido aceptarlo porque yo solo quiero una vivienda digna. Solo quiero que mis hijos estén bien. De hecho, para eso están las viviendas de protección oficial, aunque me han advertido que si me meto en una de ellas sin permiso me pueden bloquear 5 años", expone Ana Belén Bernal Escarcena, madre de cuatro niños de 12, 10, 6, y 2 años, que ha sido desahuciada este miércoles en Algeciras.