Algeciras se ha despertado hoy, como el resto de la provincia de Cádiz, en la Fase 1. Bares, cafeterías, restaurantes y comercios minoristas con menos de 400 metros de superficie tienen ya permiso para abrir sus puertas. Sin embargo, parece que incluso la desescalada tendrá sus propias velocidades.
Y lo que hoy hemos visto es que muchas de las cafeterías repartidas por el centro han optado por no abrir. Eso ha pasado, al menos hoy, en la calle Ancha, donde no hemos encontrado ninguna cafetería abierta, tampoco en la Plaza Alta, en la calle Convento o Plaza Neda, donde apenas hemos visto establecimientos a disposición del público y los que lo han hecho, con la mitad de su terraza dispuesta, tal como exige la normativa.
La mayoría de las personas con las que hemos hablado nos han dicho que la mitad de las terrazas no son rentables; otros están preparando todas las medidas de protección que exige la normativa; y hay quienes están esperando a ver cómo reacciona el público y qué efecto puede tener el miedo sobre el consumo.
La inversión necesaria en geles o señalética, el cambio de las cartas de papel por formato digital, la desaparición de elementos comunes como servilleteros, vinagreras o la imposibilidad de acceder a los servicios y al interior del bar son algunos de los cambios que están ralentizando la reapertura de bares y cafeterías; favorecido, además, por los continuos cambios en la normativa estatal y el poco tiempo que existe entre la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Tampoco las tiendas han salido a esta Fase 1 en su mayoría, quizás por los mismos motivos que los bares, porque quieren ver cómo va a ir funcionando todo o porque prefieren mantener el cese de actividad hasta que la situación se normalice.
En cualquier caso, el escenario ha cambiado mucho. Mamparas, geles desinfectantes, guantes, mascarillas e incluso termómetros se han convertido en elementos habituales en cada uno de los comercios que esta mañana han abierto sus puertas al público.
Especial dificultad entrañan las tiendas de ropa, obligadas además a desinfectar cada una de las prendas que se prueban los clientes para devolverlas a las estanterías.
Aunque las calles empiezan a tomar otro color, de momento poco impacto en el inicio de esta Fase 1.
Hemos hablado con comerciantes y propietarios de cafeterías
facebook --> facebook --> facebook --> facebook -->