Una apariencia mucho más moderna con una oferta comercial y gastronómica acorde a la ciudad. Son los objetivos que se ha marcado la delegación de Mercados del Ayuntamiento de Algeciras para el mercado Hotel Garrido que se encuentra en un proceso de reforma a través de cual se intenta acercar el edificio a los ciudadanos.
Durante los últimos años, este mercado emblemático en la ciudad había quedado olvidado. La mala imagen que proyectaba su fachada y un interior oscuro y descuidado con puestos que han ido dejando de funcionar progresivamente provocó que los usuarios dejaran de comprar allí, a pesar de encontrarse en un enclave envidiable.
La transformación de este inmueble se va a realizar en dos fases. En una primera, que ya ha concluido,se ha impermeabilizado la zona interior para aislarla de las humedades, se ha renovado la canalización de las arquetas interiores y se ha pintado tanto el interior como la fachada exterior. La segunda, que comenzará en breve, contempla la reforma energética de la fachada exterior, la renovación de toda la instalación eléctrica, la instalación de nuevas luminarias, así como la sustitución de la cristalería, para dar mayor luz natural al interior.
Pero sin duda, la transformación del Hotel Garrido viene marcada también por el cambio de concepto de mercado. Sus pasos se encaminan a que no será un mercado al uso, sino que funcionará como una galería gastronómica en la que el cliente no solo puede comprar el producto sino que si así lo desea degustarlo en los espacios de restauración del mismo mercado.
Uno de estos espacios en el Bulla. Un bar de tapeo tradicional con toques de cocina del Norte que regenta Tony Mejías. "Queremos que el Hotel Garrido sea el mercado más moderno de la zona. La idea está funcionando muy bien, aquí puedes comprar carne y pescado de primerísima calidad y comértelo aquí acompañado de un vinito y a un precio mucho más económico que fuera del mercado".
Juan está tras el mostrador de la Freiduría Camacho y asegura que "se nota en el ambiente que gracias a la reforma el ciudadano ya nos mira de otra manera". Pescado fresco de lonja y cartuchitos de pescaíto frito para llevar o tomar en el propio mercado son sus señas de identidad.
Si optamos por carne, el mercado Hotel Garrido alberga una de las carnicerías más punteras y con más tradición de la comarca, El mono sibarita. En sus vitrinas comparten espacio piezas de carnes Premium con los productos más tradicionales de la cesta de la compra.
La última incorporación a este espacio ha sido un puesto de ultramarinos, con pan de la zona y charcutería.
Tras las dos fases de reforma, al Hotel Garrido solo le queda el toque final: ponerse guapo y elegante para su clientela. Es por ello, que en los próximos meses todos los concesionarios mantendrán una reunión, propiciada por el delegado de Mercados, para acordar dotar a los puestos de una apariencia más moderna y uniforme.