Una auténtica pesadilla. Así describe una madre de Algeciras lo que su familia está viviendo estos últimos meses tras denunciar que su pareja sentimental abusó sexualmente de su hija de 13 años. El caso, denunciado ante la Policía Nacional, está en trámites judiciales. Sobre el acusado, por el momento, solo pesa una orden de alejamiento como medida cautelar. La madre de la víctima pide que la Justicia actúe con mayor celeridad.
Los hechos ocurrieron, según recoge la denuncia a la que ha tenido acceso este medio, entre el 11 y 12 de enero de este 2024 cuando, tras unos días de enfados y discusiones entre la pareja -ella de 39 años y él de 29-, ella negó a él la entrada al domicilio familiar, donde viven con cuatro menores, todas hijas de la denunciante: una niña de 14 años, la víctima de 13, otra pequeña de 10 años y una bebé de dos años; esta última fruto de la relación sentimental que mantenían ambos desde hacía cinco años. Entonces, tal y como sostiene la familia denunciante, el hombre aprovechó que, sobre las 23.30 horas del 11 de enero, su mujer salió a la calle durante unos minutos a buscarlo para entrar él en el domicilio familiar y, presuntamente, abusar sexualmente de la menor de 13 años.
"Él llevaba toda la semana borracho, fatal...yo el día 12 por la mañana llevo a mis niñas al colegio, con normalidad, como siempre, y cuando recojo del instituto a mi niña de 13 años, ella me lo cuenta todo. Me pregunta si esta persona va a volver a la casa y me detalla lo que había pasado la noche anterior. Yo mira, me fui directamente a la Policía", comparte con este medio la madre de la víctima. La pareja, en estos momentos, se encuentra en trámites de divorcio.
El caso, denunciado ante la Policía Nacional, se encuentra judicializado en manos de los abogados. "La Fundación Márgenes y Vínculos está también llevando el caso y ahora estamos esperando que el juzgado nos cite para que mi hija preste declaración en Cádiz", añade. Mientras tanto, asegura que la pequeña está siendo tratada por el equipo de psicólogos de la Cruz Roja y el grupo de orientadores de su instituto. "Tiene que tomar medicación para dormir. Yo también voy a pedir ayudar porque no sé cómo gestionar emocionalmente todo esto, nos está afectando a toda la familia", comparte esta madre.
La denunciante reclama que la Justicia atienda y resuelva este tipo de casos con mayor celeridad: "Esto tiene que ir más rápido, porque es una auténtica pesadilla". Explica que, por el momento, el juez solo ha interpuesto como medida cautelar una orden de alejamiento, que afecta también a la hija en común de la pareja, y asegura que el presunto agresor ya ha recurrido esta decisión.
"Todo esto me genera mucha rabia, mucha indignación. Encima de todo esto, tenemos que aguantar comentarios del entorno de mi expareja, de que si es mentira, que nos lo estamos inventando, que lo que queremos es una paga. Pero vamos, que vamos a llegar al final de todo esto", destaca.