La Urbanización El Greco, en El Acebuchal, sigue a la espera del derribo de una vivienda anexa construida ilegalmente que provoca inundaciones y le cierra una salida a una vía principal, entre otros problemas. Desde 2010, muchos han sido los juzgados que han desestimado recursos del propietario a la decisión municipal de demoler la casa del número 45 de la avenida Diputación, que fue construida sin licencia de obras y en un terreno en el que el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) contemplaba una carretera. El derribo se encuentra enredado en trámites administrativos, mientras que los vecinos instan al Ayuntamiento de Algeciras a ejecutar la solución "de una vez por todas".
La Plataforma Rinconcillo y Acebuchal Existe hace de altavoz de las quejas de los vecinos de la Urbanización El Greco, que lamenta el retraso en una solución a un problema que se remonta a 2004, hace ya 17 años. "Lo único que queremos es que desde el Ayuntamiento se tomen las medidas que el Juzgado ordenó con sentencia firme para que muchos vecinos puedan dormir tranquilos, sin pensar en que sus casas se van a inundar la próxima vez que llueva", lamentan miembros de la plataforma afectados en primera persona.
Según algunos de los afectados, el Ayuntamiento de Algeciras -al que este medio ha preguntado por este asunto sin obtener respuesta- asegura que los técnicos estaban redactando un nuevo documento para la demolición después. Una respuesta similar a la que dio hace casi un año a una pregunta del concejal de Vox, Antonio Gallardo.
El conflicto de la casa ilegal de avenida Diputación se inició en 2004 cuando el Ayuntamiento de Algeciras solicitó por primera vez la paralización de las obras de esta vivienda, aunque la construcción por parte del propietario siguió adelante. En 2007, la Delegación de Urbanismo solicitó su derribo y denegó las alegaciones del propietario, que acudió a los juzgados. Fue entonces, tres años después, cuando el Juzgado de Algeciras desestimó el recurso contra la solicitud de derribo, una decisión que fue recurrida en varios tribunales hasta llegar al Supremo, que dio la razón al Consistorio en 2017.
"Hemos perdido valor en nuestras viviendas a raíz de este problema, era una urbanización en una calle con salida a la avenida Diputación y ahora no tenemos salida. No tenemos interés especial en que le tiren la casa a ese hombre, sino que nos den una solución que sea para que haya una carretera que nos comunique con la avenida y no suframos inundaciones", expresa uno de los afectados, que se preguntan qué ocurre para que esta situación se esté dilatando en el tiempo y se vean en un callejón sin salida.