Seguro que los han visto. En Algeciras han proliferado en los últimos meses en distintos puntos de la ciudad. Son los radares pedagógicos que el Ayuntamiento ha instalado de manera progresiva con el objetivo de que los conductores reduzcan la velocidad en puntos considerados como 'negros' en el casco urbano.
Actualmente hay nueve repartidos por la ciudad. A los cuatro que ya se instalaron el año pasado en la avenida Virgen del Carmen y Carlos Cano hay que sumar cinco nuevos que se han ubicado en la carretera al Rinconcillo, la vía que baja de Carrefour, el Secano, en carretera a Málaga a la altura de la rotonda del Pandero y otro más en la avenida Carlos Cano.
"Lo que hacen es informar de la velocidad a la que vamos, si vamos a la superior nos aparece en rojo, si circulamos a la autorizada se ilumina en verde y además nos da las gracias por cumplir con la norma de tráfico", explica el delegado de Seguridad Ciudadana, Jacinto Muñoz.
Las ubicaciones no son un capricho ni se eligen al azar. "No son decisiones políticas, son técnicas. El ingeniero de tráfico y la policía local, dentro de las posibilidades que tenemos, estudian dónde se tienen que instalar los cinco nuevos radares en función de las demandas e incidentes que se hayan registrado", afirma Muñoz.
En este sentido, el responsable de Seguridad Ciudadana señala que el objetivo de estas herramientas es que "el conductor sea más prudente a la hora de circular. No pretendemos aumentar las sanciones solo que el tráfico sea mejor, con más seguridad para el peatón y el conductor". Cabe recordar que estos radares son meramente informativos y no multan a diferencia de los que ya se instalaron en cabinas en la avenida Virgen del Carmen y Carlos Cano, que "además están debidamente señalizados y son móviles".
Muñoz ha expuesto que la instalación de los radares sumado a la puesta en marcha de los pasos de peatones inteligentes obedece a un plan del Ayuntamiento que solo busca mejorar la seguridad vial y de hecho se está consiguiendo ya que desde que están operativos se han logrado reducir la velocidad de forma considerable en la avenida Virgen del Carmen, un punto en donde se produjeron dos atropellos mortales.
El objetivo es continuar instalando este tipo de radares en función del presupuesto municipal para contribuir a un casco urbano más seguro para todos.