En el conflicto laboral de la planta de Acerinox Europa, como en cualquiera que se aprecie, lo único innegociable para su resolución es la negociación, el diálogo. Este va a volver a producirse, por fin, el próximo viernes, 15 de marzo, en Sevilla, ante la mediación del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL) y después de 38 días de huelga indefinida, que por otra parte no se desconvoca. Una reunión que se espera que sirva para "desescalar y desbloquear la situación" con el establecimiento de un nuevo calendario de negociaciones para el convenio colectivo después de que las dos partes hayan hecho concesiones para que se den las condiciones y haya algo de esperanza para la vuelta a la normalidad en la planta de Palmones.
El comité de huelga, con José Antonio Gómez Valencia de ATA (Asociación de Trabajadores del Acero) a la cabeza, ha explicado esta mañana a los trabajadores la nueva situación: la empresa aceptó anoche la propuesta del CARL para acudir a esta nueva reunión con los representantes de los trabajadores tras acercarse su postura a la de los empleados, por ejemplo reconociendo al comité de huelga y proponiendo la suspensión de la denuncia de huelga ilegal.
La jornada de ayer, martes 12, vivió un punto de inflexión que pudo acabar con una alejamiento aún mayor de las posturas y un recrudecimiento de las movilizaciones por parte de los manifestantes. Representantes de los trabajadores denuncian que recibieron una llamada en la que se le informaba de un expediente sancionador a siete representantes del comité de huelga. Ante esto, el comité convocó una asamblea de trabajadores a las 5:00 de la mañana. "Esto iba a cambiar, no iba a haber cortes de carreteras, porque estamos cansados de fastidiar a nuestros vecinos, a la gente de la comarca, pero esto iba a ir a más", ha expresado Valencia. Poco después, el propio comité recibió un mensaje del CARL que anunciaba que la empresa aceptaba las condiciones de este órgano regulador para sentarse a negociar a partir del viernes. Un giro de 180 grados a la situación.
"Vamos a dejarnos de demandas y vamos a sentarnos para negociar un futuro para todos, para ellos también. Tenemos que hacer que esta fábrica sea más grande de lo que es pero si esclavitud, con un convenio para que ellos ganen mucho dinero pero sin perder la conciliación familiar", ha declarado el sindicalista de ATA. Ambas partes se comprometen a suspender las demandas judiciales, como las relativas a huelga abusiva y huelga ilegal por parte de la compañía, y las de derecho a la huelga y por los servicios mínimos por parte del comité. "Nadie entra a trabajar mientras alguno de nosotros tengamos una demanda puesta", ha expresado entre aplausos de los presentes.
Otro compromiso que Acerinox y el comité aceptaron fue el de iniciar un proceso de "desescalada y desbloqueo" de la situación sin presiones a las reuniones. José Antonio Gómez Valencia pidió a los trabajadores no acudir a la reunión del viernes. "Dejadno a nosotros y confiad en nosotros", ha pedido ante alguna voz en contra. También leyó el documento del CARL que el comité de huelga será el interlocutor en estas negociaciones, "pero será los trabajadores mediante votaciones en asamblea los que tengan la última palabra" y el comité de empresa el que finalmente firme el posible acuerdo para el IV Convenio Colectivo.
La huelga, por otro lado, continúa. También la concentración prevista para el próximo día 19 de marzo en Madrid, donde al día siguiente los trabajadores esperan ser recibidos por representantes políticos en el Congreso de los Diputados.