Afrontamos una Resaca dura y compleja. Para los que acuden a este rincón cada semana, gracias por anticipado, recordar, una vez más, que aquí se expresa la opinión del que escribe. Nada más. La misma está basada en su apreciación y en lo que percibe y recibe de la calle rojiblanca, de nuevo agradecimiento, por llevar algunos años en este oficio. Así que respeto a todos los puntos de vista, los que coinciden y los que no. Simplemente se pide lo mismo.
Primer argumento y para evitar dudas y comentarios rancios. El Algeciras está mal e hizo un partido espantoso en Talavera. Impropio de un equipo que se estaba jugando tanto. No hay ni una sola excusa, ni tampoco argumento al que poder agarrarse. Faltó de todo.
Segundo argumento. Las sentencias de este país. Vamos a crear 800.000 puestos de trabajo (Felipe González). España va bien (José María Aznar). Vamos a tener la mejor plantilla de la historia (Félix Sancho) o la que se escucha, de algunos aficionados, conviene no olvidar que el algecirismo es más extenso de lo que algunos se atribuyen, “nos han engañado”.
Servidor, que es socio y abonado, no se siente engañado. Más bien agradecido que gracias a Nicolás Andión y a Sancho estamos aquí. De lo contrario, no tendríamos ningún motivo para estar preocupados, enfadados o cabreados por la humillante derrota de Talavera. ¿Saben el motivo?, no existiríamos. ¿Engaños? Tiramos de hemeroteca: Verdejos, Tenorios. no pusieron tanto dinero y... bueno da igual...
Claro que se puede criticar, por supuesto que se ha fallado en la planificación, pero la base del equipo que tocó la promoción se quedó en el vestuario. Entiendo, ahora que se acercan las elecciones, que nadie perdonará una promesa falsa de un dirigente político, algo que es más importante que el balón (ironía). El resumen de esto es que lo que estamos viviendo no es más que fútbol, con todo lo maravilloso y puñetero que tiene. Está saliendo mal pero aún no ha terminado.
Tercer argumento. No hemos caído al descenso, leo en algunos foros. ¿Y qué? El equipo está en mal momento, necesita ganar un partido cuanto antes y acabar con las dudas y sobre todo recuperar la confianza. Estar a un punto de caer o de salir no es nada.
Sin embargo, parece que todo cambia desde el punto de vista psicológico y al menos está bien no verse en la zona roja., pero el mal partido de Talavera sigue siendo el mismo y la distancia con la zona media también. Por eso, tampoco hay que lanzar campanas al vuelo por ganar un par de partidos ni condenarnos, por lo contrario. Obviamente la preocupación, la mía también, existe.
Cuarto argumento. La autodestrucción de algunos. Cuando esté aquí querido lector y quiera insultar o algo similar al que escribe, vaya al primer párrafo. (El Algeciras jugó un partido lamentable en Talavera). Que yo sepa, salvo cambio de última hora, la temporada no ha terminado, el descenso, tan temido porque nos persigue (a servidor el primero) el pasado y todo lo vivido, hace que el pesimismo sea aún mayor que la realidad, que no es buena, insisto.
Escrito esto, ya hemos visto en épocas anteriores que de nada vale destruir todo cuando aún no ha ocurrido nada. Más aún cuando ahora estamos en el fútbol profesional, al menos el más cercano al mismo. Lo de estos se irán y nos quedamos, queda para otras épocas. Claro que se irán, como todos, y más aún cuando estamos hablando de gente que vive de esto. Será mejor, creo, marcharse sin un descenso en el currículum. ¿Entiendo que a ninguno nos gusta ganar menos dinero cada año?
Quinto argumento. Ania vete ya. Esto es lo clásico. El técnico, que hasta ahora había vivido en una balsa de aceite y aun así alguno lo criticaba, sabe cómo funciona esto, de sobra. En cualquier caso, como esos comentarios no van a cesar, aunque el equipo esté en promoción de ascenso, es ahora cuando se hacen más evidentes y al amparo de los malos resultados muchos se suman al carro. Pero hay una mayoría silenciosa que sabe de su trabajo y que, lógicamente, aunque también está fallando en este tramo, considera que tiene tiempo y argumentos para revertir la situación. Lo deseo por él y sobre todo por mi equipo.
Sexto argumento. En estos momentos, los peores en los tres últimos años, pero ni de lejos el más dramático de nuestra centenaria historia, también se diferencia a los hombres de los niños, a los jugadores de los futbolistas y como bien dijo el capitán Iván “todos tenemos que dar un paso adelente”. Es tarea de los que saltan al césped de los que, por cierto, no dudo de su compromiso. Profesionales, insisto.
Séptimo argumento. También aquí se evalúa a las aficiones. Nada más lejos de mi intención, ni se me ocurre, pedir absolutamente nada a los que siguen esta bendita pasión. Cada uno que haga lo que le plazca, pero conviene recordar dónde estábamos, el camino emprendido, ahora con baches, o los numerosos vídeos que el pasado año se hicieron con las alabanzas de los técnicos rivales a la parroquia. Esa que siempre ha estado, más allá del clásico y cansino para servidor los mil de siempre.
A mi modesto entender, las críticas antes y después del partido, en los 90 minutos, no estaría de más pedir al equipo que ofrezca lo mejor para que la grada, esa que siempre ha respondido, le ayude a pasar el trago. La iniciativa de las peñas de reunirse con Ramón Robert y Sancho me parece muy acertada. Ese es el foro para solicitar explicaciones, aportar ideas y remar en la misma dirección. De momento, el primer paso es acertado por parte de la propiedad con la iniciativa de rebajar las entradas para los acompañantes de los abonados. Es muy fácil acudir al estadio cuando las cosas van bien, sin quitar méritos a todos los que acuden a diario.
Octavo argumento. El domingo espero y deseo, como todos, de eso no tengo duda alguna, que ganemos los tres puntos y sea el momento de cambiar la dinámica. Si es así, habrá que seguir porque esto no acaba, para bien o para mal. Ahora que hace dos años que se me fue el que me enseño esto, y en un momento complicado que no definitivo para los nuestros, gracias Papá por hacerme de un equipo tan especial. Orgulloso de seguir siendo algecirista.
Mientras tanto, piten, critiquen, sean felices, disfruten y sobre todo siempre Shiraaa.