Un punto más y una jornada menos. La Resaca afronta el tramo definitivo, que diría Luis Aragónes, con la preocupación de la mayoría de algeciristas pero también con el deseo, confianza o como quiera calificarlo cada uno de los que profesan esta pasión, que el final será el deseado por todos y que la próxima campaña seguiremos viendo la maravillosa y puñetera Primera Federación. Llegan las 10 de últimas.
El empate ante el Córdoba ofreció muchas de las bondades y miserias que ha mostrado el cuadro de nuestros amores durante las 28 jornadas que llevamos de campeonato. Atrevimiento, aunque ahora menos brillante por la situación que en el primer tramo, intensidad, ocasiones, menos que en jornadas precedentes, y también el déficit de regalar al contrario. Eso no se puede hacer en esta categoría y menos ante un oponente que, si bien es cierto demostró poco para su potencial, tiene mucha calidad.
“Son toma de decisiones en segundos y los equipos que estamos abajo nos equivocamos más y por eso te metes ahí”, vino a decir Iván Ania respecto a jugar en largo, lo hizo Miño hacia Siddiki en muchas ocasiones, o poner nervioso al público, que mostró su apoyo durante la mayor parte del duelo con mención especial para el Fondo Sur, con el juego entre centrales.
Nada que ver
El asturiano coincidió con Germán Crespo, que esta vez fue otro respecto al que vino con el Jaén, en que ni uno ni otro estaban en su mejor momento. Sólo hay que ver el espectáculo, de ambos, en la primera vuelta, y lo del pasado domingo en el maravilloso césped del templo rojiblanco. “No podemos mentir a la gente, es evidente que no estamos bien”, sentenció un Ania que, en cualquier caso, como la mayoría, acabó por valorar el punto conseguido y sobre todo la intensidad y actitud de los profesionales que visten la sagrada zamarra algecirista.
En cualquier caso el punto sirvió para salir, momentáneamente e igualados con el descenso, de la zona roja. En realidad la pelea sigue pero en el aspecto moral parece, aunque no sea real, que se afronta mejor lo semana.
Ni ganar al Córdoba era la permanencia, ni perder la condena. Habida cuenta de los resultados y la pugna existente, tanto por el play-off de ascenso como por la salvación, miren la tabla y esto no va con ánimo de excusa ni de convencer a nadie, habrá que remar hasta el último día. Lo de la exageración que tanto nos gusta a los que seguimos a esta bendita religión habría que intentar controlarlo, pero insisto una semana más, cada uno que haga lo que estime oportuno.
El sábado llega la visita a Linarejos. Allí, con el homenaje al eterno Juan Antonio, los de Ania vencieron 0-3 el pasado año. Nada que ver con la situación actual, pero enfrente está el único equipo que, por ahora, parece estar en tierra de nadie. Lo que nunca se sabe si es bueno o malo, pero sin duda que ya da igual el que se ponga en frente. Se trata de conseguir, cuanto antes, los 43-44 puntos que permitan analizar y reflexionar sobre los errores cometidos y las necesidades a cubrir. Claro que, de momento y salvo que alguien demuestre lo contrario, eso se está haciendo con el dinero de, ahora, dos inversores. Criticar, con respeto, está más que permitido y necesario, contar milongas y no valorar las cosas....
Mientras tanto, y con el deseo de mantener esta categoría, gracias por el seguimiento, sean felices, disfruten y siempre Shiraaa.
PD: Precioso los homenajes, tanto dentro como fuera del estadio, al eterno Martín Gil. Desde arriba, como tantos otros, seguro que estará empujando para hacer la foto de la permanencia.