A la tercera fue la vencida, y venció. El Algeciras Club de Fútbol ganó 0-1 en su visita al Hércules de Alicante. Un triunfo merecido, con un tanto de Álvaro Mayorga de cabeza a la hora de partido después de que los locales jugasen con uno menos desde el minuto 12 por una expulsión tras pedir revisión del VAR. Los de Javi Vázquez suman ya cuatro puntos en tres partidos. Victoria justa y necesaria.
El Hércules intentó llevar la iniciativa y tuvo varios acercamientos sin excesivo peligro para la portería de Samu Casado, una de las novedades introducidas por Javi Vázquez para este partido, que ya avisó que iba a haber cambios.
El partido estuvo marcado, sin duda, por una jugada del minuto 12. Un balón en largo en busca de la velocidad de Isaac Obeng lo cortó el defensa Rentero con el brazo cuando era el último hombre. El árbitro no lo vio pero el futbolista albirrojo hizo todos los aspavientos que pudo para pedir revisión porque lo vio claro. Esta vez el VAR sí le funcionó al Algeciras: roja directa.
A partir de ahí, otro partido. El cuadro algecirista se quedó con la posesión y el Hércules, en inferioridad, se reajustó metiéndose muy atrás, con dos líneas muy juntas en campo propio. Las bandas fueron la principal baza algeciristas. Rastrojo entró con todo por la suya y puso el balón en el centro del área donde cabeceó Obeng blando, aún así superó al portero pero un defensor local despejó la pelota que iba a entrar.
Obeng, otra de las novedades, desquició a su par y creó mucho peligro. Un puñal que no estuvo afilado cara a puerta. Al Algeciras le faltó profundidad y conectar con el ataque, donde Juanma estaba muy bloqueado por la amalgama de blanquiazules. Aún así, en los minutos finales tuvo dos ocasiones, una de Iván Turrillo que tocó en un defensa, y un disparo claro de Tomás que paró Carlos Abad. El Hércules, entre ambas jugadas, solicitó penalti pero la revisión no lo dejaba nada claro y el árbitro dijo que nada.
El descanso llegó con empate a 0-0, con el Algeciras con un jugador más y mejor, pero no lo suficiente como para ir por arriba en el marcador. Todo por decidir en el segundo tiempo.
En la segunda mitad, el Hércules intentó salir algo más de la cueva porque tras la expulsión casi renunció al ataque. No le duró mucho esa actitud. El Algeciras volvió a tomar el mando, pero le faltó otra vez gol. La más clara de todo el partido fue en el 60'. Recuperó Rastrojo cerca del área, tenía a Juanma y Obeng para un pase de gol pero cortó uno de los dos defensas presente y el rechace llegó a Juanma García que lanzó pero también dio en un rival y salió a córner. Increíble que la jugada no acabara dentro. Pero, lo que es el fútbol, llegó en el saque de esquina. El centro llegó a un imperial Mayorga que se elevó sin oposición para hacer el ansiado y perseguido 0-1. Por fin.
El Algeciras tomó la delantera. Le costó pero lo logró de nuevo a balón parado. Fuera fantasma. El conjunto de Javi Vázquez tenía un escenario inédito esta temporada: estaba por delante en el marcador. Parecía que los algecireños tenían controlada la situación, por delante y en superioridad. Incluso pudo matar el partido Manín, que recién entrado tuvo un mano a mano y falló.
El Hércules se fue arriba con corazón, el Algeciras jugó sus peores minutos en la temporada y los locales inquietaron. En el descuento, Jony Álamo —no muy brillante en algunas decisiones— vio la segunda amarilla y alentó al Rico Pérez y a los alicantinos. Tuvo opciones pero la defensa algecirista fue capaz de dejar la portería a cero por segunda jornada y los algecireños, que esta vez sí vieron puerta, sumaron la primera victoria de la temporada 2024/26. Lo dicho, justa y necesaria.