Luto en la natación algecireña tras el fallecimiento de Diego Zamora

Fue árbitro, delegado y eterno colaborador del desaparecido Club Natación Algeciras

18 de Enero de 2022
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La natación algecireña está de luto tras conocerse el fallecimiento de Diego Zamora, persona vinculada al Club Deportivo Natación Ciudad de Algeciras (y especialmente al extinto Club Natación Algeciras) desde hace muchísimos años y que prácticamente ha hecho de todo en la entidad, siendo además árbitro de la delegación gaditana.

Muchas han sido las muestras de condolencias, siendo una de las más comentadas de un hombre que le conoció muy bien, no en vano fue presidente del CN Algeciras, Francisco García Corral, que en sus redes sociales ha escrito lo siguiente:

"Un guerrero, ese era su segundo apellido, hizo siempre honor a ello. Nos acaba de dejar físicamente, pero los que lo conocimos o lo tratamos nunca nos va a dejar, porque era una de las personas que siempre calan sin darte cuenta en tus sentimientos, y lo valoras, cuando te enteras de que ya nunca más podrás tener largas conversaciones de los más diversos temas de nuestra vida cotidiana, jamás pensé que un día tuviera que escribir algo como esto.

Su popularidad estaba en el mundo de la natación, en un ámbito aún más pequeño, el del arbitraje. Fue el representante de los árbitros de la Delegación Andaluza en Cádiz, que desarrolló a la perfección, y no creo que en el futuro exista una persona que lo lleve como él lo hizo, sin publicidad, sin protagonismo sin esperar nada a cambio. Nunca fallaba, siempre estaba donde deseabas que estuviera.

Mis últimos años al frente del Club Natación Algeciras, especialmente en la década de los noventa, desempeñaba también las funciones de delegado de club. Tuvimos una gran suerte de contar con Diego, no se le escapaba un detalle. Como anécdota, siempre lo he contado; tenía una memoria fuera de lo común, prodigiosa. Cuando en las competiciones había que rellenar las fichas de los nadadores, donde había que poner el DNI y el nombre, Diego no tenía que consultar nada, te decía todos los datos de los deportistas sin fallar en un número, eran más de un centenar, y así una vez tras otra, no era causalidad. Fue un lujo contar con él. Cuando le mostraba mi admiración por ello o le preguntaba cómo lo hacía, su respuesta era una sonrisa y ni una palabra más. Con eso me quedo, con aquella sonrisa inocente que chocaba con su aparente seriedad.

Por su físico, le comenté en más de una ocasión que si lo hubiera visto David Lean, lo habría contratado como militar japonés en la película 'El puente sobre el río Kwai'. Su respuesta siempre era la misma, una sonrisa.

Fueron muchas horas de piscina, muchas de autobús, miles de kilómetros por toda España, disfrutamos de los mejores momentos de la natación algecireña, de las alegrías de los extraordinarios e irrepetibles nadadores que disponíamos, y de algún que otro contratiempo que queda almacenado en el baúl de las anécdotas.

Cuando nos apartamos del mundo de la natación nuestros contactos se fueron dilatando, pero que nos poníamos al día, en cuanto nos veíamos en nuestros largos paseos matutinos, especialmente en el entorno del Rinconcillo. Sus hijos (Diana y Diego) estuvieron vinculados al Club Natación Algeciras como nadadores, ahora sigue la zaga en sus descendientes.

Diego, al igual que yo, hay muchos jóvenes, una generación de deportistas, de nadadores, que nunca te vamos a olvidar. Se que estarás en el mejor lugar que se pueda estar, porque te lo mereces, te lo has ganado con tu trayectoria limpia y honrada".

Desde el club se ha señalado que "siempre aportó su lado más amable y positivo. Deja un legado grande entre nosotros, a sus hijos Diana, Diego, y formando parte de nuestros nadadores, sus nietos, que con la ilusión que su abuelo les transmitió, llevan con orgullo el cloro en sus venas.No existe palabra que pueda abrazar, que llene el vacío que dejan las personas cuando se van. Pero siempre nos quedan esos momentos vividos, los recuerdos. Ahí vivirá entre nosotros sonriente".

Otro de los mensajes que más repercusión han tenido ha sido el escrito por Antonio Jesús Redondo Ocaña: "Hoy quiero rendir homenaje a un pilar muy importante de mi vida que nos ha dejado, esta pérdida ha sido injusta, principalmente para el que empezó ha trabajar desde muy joven para ayudar a su familia.Desde que lo conocí en 1993, ha sido una persona luchadora, trabajadora y siempre ha querido evitar conflicto, siempre ha utilizando el dialogo y evitando el confrontamiento incluso hasta en los momentos más duros que ha tenido cuando cerro la fábrica donde trabajaba.Gran marido, padre, abuelo y suegro, siempre dispuesto ayudar, aconsejar y disfrutar con su familia.Se ha ido dejando un gran legado gran legado, sus dos grandes hijos y sus cuatros nietos, que la verdad por ahora siguiendo los pasos de su abuelo.Que más se puede pedir de esta persona, pues si hay algo que te reprochare te has ido muy pronto.Superarte como persona será muy difícil, casi imposible, gracias por todo lo que me has enseñado y todos los consejos aportados.Nunca te olvidaremos Don Diego Zamora".