Ya son 18 días sin noticias de Paco Cano. El profesor jubilado de Los Barrios, muy vinculado al mundo del deporte y el atletismo, que desapareció el pasado 13 de agosto cuando salía a caminar. Su familia asegura encontrarse en una situación "desesperante" y critica la falta de comunicación y coordinación sobre las labores de búsqueda de Paco.
"Estamos, que no sé cómo estamos. La situación es muy complicada", comparte Irina Cano, hija de Paco, con 8Directo. Nos encontramos con ella en la Venta El Frenazo de Los Barrios, punto de salida de las distintas batidas con voluntarios que se han desarrollado dentro del dispositivo de búsqueda de su padre. Triste, algo apagada, pero entera, nerviosa pero firme y convencida de cada palabra que comparte con este medio, explica que la familia está sumida en el desánimo, la indignación y la frustración, denunciando la falta de trato e información oficial sobre los trabajos de búsqueda.
"Nosotros, a día de hoy, no tenemos información oficial sobre cómo va la búsqueda de mi padre. La policía judicial, que es la encargada de la investigación, nos remite al juzgado para saber cualquier cosa relativa a esta búsqueda. No puede ser que una familia que se está enfrentando a una situación así, a la desaparición de un familiar, tenga que recurrir a un abogado y esperar a equis días después para saber algo", asegura Irina, que subraya que esta crítica la lanza hacia los mandos que llevan el caso de su padre, no contra los agentes de los distintos cuerpos implicados: "Estoy segura y convencida que ellos están haciendo todo lo posible, que son profesionales, y se lo quiero agradecer. La gente de pie y los cuerpos especiales están dándolo todo. No quiero poner en duda, en ningún momento, su profesionalidad".
Irina Cano critica la rumorología que rodea a la investigación: "No nos llega ninguna información contrastada ni confirmada. Solo informaciones basadas en rumorología. Por ejemplo, sí es cierto que mi padre cometó que quería hacer una ruta hacia Medina. Pero lo de Medina sería un comentario de mi padre como otro cualquiera, podría haber comentando que quería hacer una ruta a Tarifa, Fascinas o cualquier sitio."
Francisco Cano Cano, de 77 años, desaparece el sábado 13 de agosto, el domingo la familia lo comunica a la Guardia Civil y el lunes se interpone la correspondiente denuncia. A partir de ahí, aseguran, se suceden "una serie de despropósitos descomunales"; "como cuando nos dicen que una persona lo ha visto el lunes cerca de casa y que se desactiva la búsqueda, pero luego por la noche veo en las redes que el alcalde está haciendo un llamamiento para una batida con voluntarios. Mi hermano se pasó al día siguiente por el cuartel y resulta que nos dicen que no, que esa información de que lo habían visto no estaba contrastada, que no era cierta. ¿Cómo se le puede dar a la familia de un desaparecido una información que no está confirmada? Es todo un cúmulo de despropósitos que aumenta más el dolor, la desesperanza y el sufrimiento de todos".
La familia insiste que se siente abandonada. "Con respecto a la búsqueda nuestro canal debería ser la policía judicial, pero la poca información que nos llega es a través de las redes sociales y el perfil personal del alcalde. Con nosotros no se ha puesto en contacto nadie. Ni siquiera para ofrecer un apoyo a la familia. No puede ser que, 18 días después, estemos ante una situación de desconocimiento total del itinerario, de los avistamientos, de lo que se ha batido, de lo que se ha hecho, de lo que se está haciendo". Un desconocimiento que, sin duda, aumenta aún más la desesperación de esta familia.
La única certeza que maneja la familia de Paco Cano es que su desaparición no ha sido voluntaria. "No tengo datos ni ninguna otra información para saber qué le ha pasado por la cabeza a mi padre, la ruta que hizo ese día. Pero después de 18 días, que no se haya puesto en contacto con nosotros no es normal. Que desaparezca a las 08.30 horas del pueblo, que lo conoce todo el mundo, no es normal. Hay algo extraño que no nos encaja. Su desaparición no ha sido voluntaria".
En medio de esta pesadilla, una agonía que se repite un día y otro, Irina y su familia agradecen el apoyo que están recibiendo de todo el pueblo de Los Barrios: "No me cansaré de decirlo, gracias por cómo nos está apoyando la gente de Los Barrios. Gracias a ellos esto se hace un poquito más soportable. Gracias a los vecinos de Los Barrios y toda la comarca, incluso a nivel nacional, en la distancia, nos animan nuestros amigos de Valladolid, familiares y amigos del pueblo de mi padre en Almería. Él es una persona muy conocida", apunta Irina y destaca además el apoyo prestado por la asociación SOS Desaparecidos.
Nos despedimos de Irina Cano en el comienzo del sendero del Corredor Verde Dos Bahías que solía frecuentar su padre; ella tiene previsto echar el resto de la mañana andando por el monte, como hacía él, en busca de algo de aliento, de oxígeno, de alguna pista o prueba. Antes de iniciar el camino aprovecha para hacer un llamamiento: "Cualquier persona que tenga alguna información, idea o comentario, algún detalle por tonto que le parezca, que lo comparta con las autoridades y la familia, por favor. Puede ser un hilo para seguir la investigación y saber qué le ha pasado a padre. Estamos desesperados y desamparados. Esperamos tener noticias pronto".