El desvío del arroyo de Tarifa (1887-1889)

05 de Mayo de 2025
El desvío del arroyo de Tarifa (1887-1889). Lámina 9. Salida del túnel vista desde el interior (Foto del autor).

El presente trabajo trata sobre una empresa tan trascendental para el urbanismo de Tarifa como fue la canalización del arroyo por fuera de la ciudad. Así lo explica el Instituto de Estudios Campogibraltareñosa través del artículo El desvío del arroyo de Tarifa (1887-1889), publicado en la revista Almoraima número 62 para la difusión de la historia y el patrimonio de esta comarca.

Andrés Sarria Muñoz es el autor de este trabajo, en el que detalla que la primera intención de desvío del arroyo de Tarifa se planteó en los años iniciales del siglo XIX con ocasión de las obras para unir la isla de las Palomas a tierra firme. En la década de 1840 presentó un proyecto el vecino José Illescas, aprobado por la autoridad competente, pero que tampoco prosperó. Facilitó la resolución de este asunto la declaración como inútiles para la guerra las murallas de Tarifa en 1865, con lo que ya eran factibles las obras civiles en los contornos de la población. Por fin, en 1883 se presentó el proyecto del arquitecto provincial Juan de la Vega para dirigir el río desde la zona del Retiro hasta la playa de la Caleta. La obra se ejecutó entre 1887 y 1889 bajo la dirección del nuevo arquitecto provincial Amadeo Rodríguez, con algunas modificaciones respecto del proyecto primitivo.

"La primera opción barajada por el Ayuntamiento fue la de hacer el túnel de desvío algo más alejado de la población para llevarlo hasta la pequeña cañada que llega al mar junto al cerro del Camorro, lo que sería desechado por su excesivo coste. El proyecto definitivo fue firmado en 1883 por el arquitecto provincial Juan de la Vega, contemplando la canalización desde la zona del Retiro a escasos metros del flanco este de la muralla con su desagüe en la Caleta inmediato a la torre de los Maderos. Su ejecución quedó en suspenso debido a la epidemia de cólera que llegó a Tarifa a comienzos de 1886. Tras diversas vicisitudes, la obra pudo ejecutarse entre 1887 y 1889 bajo la dirección del nuevo arquitecto provincial Amadeo Rodríguez. Sin ser una obra de gran envergadura comparada con otras de este tipo, para Tarifa constituyó una infraestructura de mucho calado. Con ella, la población se protegía de las relativamente frecuentes riadas en el casco urbano, eliminando a la vez la pestilente cloaca que en realidad era el cauce intramuros", expone Sarria Muñoz entre sus principales conclusiones.

Lee el artículo completo en: Andrés Sarria Muñoz. “El desvío del arroyo de Tarifa (1887-1889)”. Almoraima. Revista de Estudios Campogibraltareños (62), abril 2025. Algeciras: Instituto de Estudios Campogibraltareños, pp. 31-42.