El Ayuntamiento de La Línea de la Concepción ha sacado a licitación el proyecto de rehabilitación integral del edificio de la antigua Ayudantía Marítima, que será reconvertido en la nueva sede de la Jefatura de la Policía Local. La actuación cuenta con un presupuesto de 1.652.892,55 euros y un plazo de ejecución de 10 meses.
El inmueble, actualmente en desuso, será completamente reformado para adaptarse a las necesidades operativas y funcionales del cuerpo policial. Entre las intervenciones previstas se encuentra la redistribución de espacios interiores, la demolición parcial de escaleras para incorporar un ascensor, la adaptación estructural a las normativas vigentes y la creación de nuevas zonas exteriores, como aparcamientos y accesos públicos.
El nuevo edificio contará con tres plantas, organizadas en función de los servicios policiales: una planta baja destinada a la atención al público con accesos diferenciados, una primera planta con vestuarios y espacios de organización interna, y una segunda planta para uso administrativo. El diseño prevé además una fachada moderna, que combine iluminación natural y eficiencia energética, y una cubierta plana para la instalación de equipos técnicos.
La reforma incluye la demolición de la cubierta original de tejas, sustituyéndola por una cubierta accesible, así como la reparación de estructuras dañadas por el ambiente marino y la mejora de la ventilación en planta baja para prevenir problemas de humedad.
La actuación contempla también una transformación del entorno urbano. Se eliminarán los vallados existentes para abrir la parcela al público, reordenar los acerados y crear zonas de estacionamiento —incluyendo bases de carga para vehículos eléctricos— y marquesinas de protección. La intervención se plantea como una mejora integral del entorno, con criterios de accesibilidad y funcionalidad.
La futura jefatura sustituirá las actuales instalaciones policiales, ubicadas en un edificio de apenas 990 m² adaptado a partir de los antiguos juzgados. El nuevo espacio se ajustará a las necesidades actuales y futuras de una plantilla de entre 120 y 130 agentes, que trabajan en turnos de 40 a 50 efectivos, y a un parque móvil compuesto por vehículos, motos y quads.
El proyecto ha sido consensuado con los técnicos municipales y representantes de la Policía Local, en una serie de reuniones que han definido el programa funcional y el diseño del nuevo equipamiento.