Y la Virgen del Carmen volvió a navegar por las aguas linenses. Tras un año pasado que procesionó únicamente por tierra, la Patrona de los marineros volvió a su reino marítimo y lo hizo ante la emoción y las miradas de una multitud.
El templo de La Atunara congregó en sus puertas miles de linenses y algún visitante que acudió a la llamada de las bellas estampas que suelen dejar las salidas desde la Iglesia del Carmen, con los dispares azules del cielo y el mar como telón de fondo
La ciudad esperaba con ansias este día de la Virgen del Carmen, ya que el pasado año no se pudo navegar por falta de permisos. Con esta situación resulta por la hermandad, la Virgen del Carmen salió a las 18.00 horas desde la Parroquia del Carmen. Desde allí avanzó entre vivas y guapas, alguna lágrima y mucho sentiemiento, para subirse a bordo de la embarcación que ya la esperaba en las aguas de La Atunara y surcarlas y vendecirlas.
La Asociación Musical Ibis Clausus fue la encargada del acompañamiento de música. También la acompañaban las almas de los devotos, por tierra y, qué alegría, por mar. Y hasta las reinas y damas de la Velada y Fiestas. Una jornada muy linense, y bella.