España es, quizá, uno de los países más solidarios del mundo, y esto lo podemos afirmar debido al altísimo número de donaciones de órganos y tejidos que realizamos, lo que nos coloca como líderes mundiales.
Precisamente, la donación de sangre en España no deja de aumentar: más de un millón de españoles de entre 18 y 65 años lo hicieron en 2024. La mayoría de estas personas realiza esta labor de manera altruista, es decir, sin esperar nada a cambio y con el mero hecho de ayudar a otros seres humanos. Aun así, existe un gran número de beneficios para la salud que recibimos al donar sangre. En este artículo te cuento lo que dice la ciencia.Menor probabilidad de cáncer:
Menor probabilidad de cáncer
Un estudio reciente encontró que los donantes frecuentes desarrollan mutaciones en el gen DNMT3A que responden bien a la eritropoyetina (EPO), una hormona que se activa tras la donación. Estas células mutadas se expanden de manera saludable y desplazan a clones potencialmente precancerosos, sugiriendo una adaptación beneficiosa al donar sangre.
Además, diversos estudios en China han observado que las personas que donan sangre regularmente presentan entre un 18 % y un 58 % menos de probabilidad de padecer determinados tipos de cáncer, como hígado, pulmón o linfoma.
Reducción del exceso de hierro y protección cardiovascular
Con cada donación, eliminamos aproximadamente 200 mg de hierro. Este depósito de hierro actúa como un agente oxidante y perjudica a nuestros vasos sanguíneos. Disminuir los niveles de hierro (siempre y cuando no haya un déficit) mejora la vasodilatación y la salud vascular, lo que nos protege frente a infartos e ictus.
Además, donar sangre ayuda a disminuir la viscosidad (espesor) de la sangre, lo que facilita su circulación y reduce el riesgo de formación de coágulos o trombos.
Chequeo de salud gratuito
Antes de donar sangre, el personal de salud nos realiza un pequeño examen previo a la extracción, en el que se miden parámetros como la tensión arterial, el ritmo cardíaco o los niveles de glucosa en sangre. Esto puede ayudar a detectar enfermedades en fases tempranas.
Asimismo, nuestra sangre es posteriormente analizada en un laboratorio antes de ser almacenada, de modo que el servicio médico contactaría con nosotros en caso de detectar alguna patología grave, como VIH o hepatitis.
Bienestar emocional
Cuando realizamos un acto altruista, se desencadena la liberación de neurotransmisores como la oxitocina (la llamada “hormona de la felicidad”), la dopamina y las endorfinas, que reducen la ansiedad, mejoran el estado de ánimo y fortalecen el sentido de pertenencia social. Todo ello contribuye a aumentar nuestra longevidad.
Este conjunto de beneficios no solo valida la importancia social de la donación, sino que convierte a los donantes regulares en protagonistas de su propia salud.
Referencias:
[1] Tiwari, A., & Psutka, S. P. (2016). Iron stores and vascular function in voluntary blood donors. Arteriosclerosis, Thrombosis, and Vascular Biology, 36(5)
[2] Vollaard, E., Rabelink, T. J., & van ‘t Veer, C. (2025). Voluntary blood donation and clonal hematopoiesis—functional selection of DNMT3A mutations. Blood.
[3] Su, S., et al. (2022). Association between blood donation and malignant and benign tumour risk: A population-based study of 3.4 million participants in China. Journal Name, Volume(Issue), Pages
[4] Kronenfeld, M. R., et al. (2021). Voluntary blood donation in modern healthcare: trends, challenges, and opportunities. PMC Journal, Volume(Issue), Pages.
[5] Revista Vital FCV. (2024, octubre 2). Discover the health benefits of donating blood. Vital FCV Magazine.