Ocho meses de Algeciras a Ucrania, una segunda oportunidad para más de 20 perros y 9 gatos

Sofía Furse.
Periodista
14 de Diciembre de 2022
Alba García, junto a un compañero y dos de los perros rescatados.
Alba García, junto a un compañero y dos de los perros rescatados.

Ha arriesgado varias veces su vida para salvar a perros y gatos afectados por la invasión rusa en Ucrania. Ella es Alba García, algecireña de 30 años que ha regresado esta semana en su último viaje de rescate. En total, han sido 23 perros los que tendrán una nueva vida, 19 en España y 3 en Alemania, y 9 gatos. "Debería sentirme contenta porque lo he logrado, prometí rescatarlos y lo he hecho. Pero no puedo parar de pensar en los perros que quedan allí, que se comen unos a otros, y que seguramente mueran de hambre", lamenta.

La joven lleva desde marzo haciendo varios viajes a Ucrania y Polonia con el fin de poner a salvo al mayor número de animales posibles. "Estoy muy triste por los que no he podido traer. Pero ahora necesito centrarme en todos los que sí prometí traer y están aquí, y encargarme de todos los rescates que tengo aquí en el Campo de Gibraltar", dice Alba con un hilo de voz, visiblemente afectada.

Uno de los perros rescatados.

La buena voluntad y dedicación de la algecireña requiere ahora de la participación activa de los ciudadanos de la comarca y del resto del país. "Necesito colaboración y difusión. Estamos costeando los gastos veterinarios y de las casas de acogida. Pero necesito ayuda de todo el que simpatice con la causa. Cualquier ayuda es bienvenida", indica. Por el momento la mayoría de los animales que han llegado a España y, en concreto, al Campo de Gibraltar, se encuentran en casas de acogida temporales, pero necesitan un hogar, una familia que les de una segunda oportunidad y volver a nacer en otro entorno y con otras condiciones de vida. "En el caso de Murphy, uno de los rescatados, tiene una deformidad en una pata y no sabemos si tendrá que ser amputada o necesitará una prótesis", cuenta a 8Directo.

"me llevará un tiempo asimilarlo"

Alba García, animalista algecireña que ha viajado a Ucrania para rescatar animales

Alba García ha estado yendo y viniendo durante ocho meses a Ucrania. Lo que ha visto, dice, que ha sido algo que nunca olvidará y que aún le cuesta asimilar. "Debería estar más contenta de lo que estoy, soy consciente. Pero estoy bastante triste. Quedan muchos animales allí que no son de nadie, que están metidos en jaulas. Esos van a morir allí. También hay muchos que les faltan patas o que necesitan rehabilitación porque tienen muchísimo miedo", añade mientras asegura estar aguantándose las lágrimas durante conversación. "Supongo que me llevará tiempo asimilarlo. Yo pensaba que cuando llegara iba a estar contenta por aquellos que sí he podido traer", reflexiona.

"Estoy reventada física y psicológicamente, tanto, que ya no sé ni cómo estoy. Sé que lo he logrado. Que hay muchos que se encuentran ya a salvo. Pero en Ucrania hay muchos que están totalmente abandonados, perros que se mueren de hambre y que se comen unos a otros porque la gente no va a darles de comer, bien porque no hay comida o porque el pueblo está en ruinas", relata sobre la situación en la que se encuentran muchos de los perros atrapados y abandonados en el país atacado por las tropas rusas.

Campo de minas

"Me acuerdo de una de las veces nos encontrábamos en la frontera para sacar a los perros rescatados y uno de ellos huyó a un campo abierto de minas. Fue horrible. No vimos que le pasara nada pero podemos imaginarlo. Es sentir dentro esa cosa que se te queda por dentro al preguntarte qué le habrá pasado, si habrá logrado ponerse a salvo", comenta con pena recordando esos momentos.

Aunque ha ido sola, se ha encontrado a su camino a personas y asociaciones que le ha hecho un poco más llevadera la experiencia. "Sin las personas que me han apoyado no habría sido posible. A todas ellas les estaré eternamente agradecida", recuerda Alba García.

"estoy reventada psicológicamente. ya no sé ni cómo estoy"

Alba García, animalista algecireña que ha viajado a Ucrania para rescatar animales.

La primera vez que fue a Polonia lo hizo a través de una asociación que le pidió ayuda para bajar a España a varios perros. Esta asociación dejó el proyecto y fue entonces cuando Alba se preguntó: "¿Cómo voy a abandonar a estos animales?" Ahí decidió continuar sola, de una forma u otra. Desde marzo lleva involucrándose en esta aventura, entre Polonia y Ucrania, muy sufrida pero que le ha dado también muy buenos momentos. "Es alegría y tristeza a la vez. El primer viaje lo hice con aquellos perros que sí tenían documentación y tenían todas las pruebas realizadas. Quedan diez que no estaban en ese momento preparados. Ya tienen la documentación y las pruebas, solo falta resolver las cuestiones de transporte. Sin fondos es imposible", lamenta.

"Esta ha sido una bonita experiencia. Muy dura pero satisfactoria, ya que he conocido a mucha buena gente. Sin embargo, ha habido semanas en las que solo he podido ducharme dos veces. Y acabas con la ropa muy manchada. Creo que he gastado cientos de toallitas y he pasado mucho frío, hasta el punto de que llegué a tener los labios en carne vivaAun así, volvería a vivirlo una y otra vez", confiesa a 8Directo la animalista.

El entorno de Alba García sabía que ella tenía que hacer algo, aportar su granito de arena. "Lo que les extrañó es que hubiera tardado tanto en ir", reconoce. La joven emprendió su primer viaje a finales de marzo con el fin de rescatar, cuidar y dar de comer a perros y gatos heridos durante la invasión rusa. Allí dice haberse encontrado verdaderas barbaridades: "Vi animales muertos, tiroteadosperros que han sido violados por los rusos. Yo en España he visto mucho maltrato, pero nunca nada así. Lo de allí cala, te impacta. Aquí, en el Campo de Gibraltar, al menos hay protectoras que intentan mejorar las condiciones de vida de los animales, pero allí hay zonas desiertas en las que los animales se comen entre ellos".