"Estamos viendo tiburones peregrinos en el Estrecho, pero son inofensivos"

27 de Mayo de 2020

Seguro que en los últimos días os ha llegado algún vídeo a vuestro teléfono en el que puede verse a orcas jugueteando con una pequeña embarcación neumática, o incluso una aleta de tiburón junto a unos bañistas. Se trata del tiburón peregrino, un animal completamente inofensivo, que navega con la boca abierta porque se alimenta de plancton y microplancton. Nos lo cuenta Aurelio Morales Argaiz, capitán de la embarcación de la empresa Marina Blue, dedicada al avistamiento de cetáceos y con más de 20 años de experiencia navegando en aguas del Estrecho.

"Estos animales son muy cosmopolita. En esta época suelen acercarse mucho a zonas de costa y por eso se hacen más visibles. Aunque algunos de los vídeos que estamos viendo pertenecen a otros puntos del litoral mediterráneo, hemos podido comprobar por nosotros mismos y por otras imágenes que nos envían, que el tiburón peregrino se está dejando ver en aguas del Estrecho, pero la gente tiene que saber que son totalmente inofensivos, que lo único que hacen es filtrar el agua, como otras ballenas, para obtener alimento", explica Aurelio, quien añade que estos animales tienen un tamaño de entre ocho y 10 metros y pueden pesar entre cuatro y seis toneladas.

"El peregrino es una especie más pequeña que el tiburón ballena y sabemos que son tiburones peregrinos y no otros por el color de la piel que vemos en los vídeos y por su tamaño. Pero, como digo, no hay ningún peligro. Entiendo que ver una aleta dorsal sobre el agua siempre produce cierto miedo, pero lo cierto es que se alimenta de plantas y pequeños crustáceos. Nada más", añade el patrón.

Las orcas, una especie residente

Otra de las especies que se están haciendo muy visibles son las orcas. Aurelio Morales explica que en época de almadraba, cuando el atún está emigrando, las orcas ven una oportunidad única para alimentarse. "Las orcas y los atunes siempre han estado asociados. Ya los fenicios contaban que eran las orcas quienes metían a los atunes en las almadrabas que ahora se levantan en Conil, Barbate o Zahara de los Atunes", explica el cofundador de Marina Blue.

El hecho de que las orcas, un animal que puede medir entre 8 y 9 metros y pesar hasta 8 toneladas, se acerquen a las embarcaciones responde a un comportamiento habitual de la especie. "Son animales muy curiosos, y les encanta navegar junto a los barcos, incluso debajo de las hélices de los grandes barcos, y les acompañan en la navegación hasta que ellas quieren. Pero no son animales intrusivos, su actitud no es de agresión, sino todo lo contrario, y nunca se verá en ellas una intención de volcar una embarcación o algo similar", señala el patrón.

Aurelio Morales navega durante todo el año en aguas del Estrecho y su experiencia en el mar durante décadas le lleva a afirmar que las orcas han encontrado en el Estrecho un lugar, no solo para emigrar, sino también para quedarse. "En estas aguas hay muchísimos atunes durante todo el año y eso les facilita estar alimentadas. En los meses de febrero y marzo hemos visto a familias completas de orcas y eso nos indica que viven aquí. Es verdad que ahora los atunes son más grandes que los que se encuentran el resto del año, pero la abundante comida les facilita estar en esta parte todo el año", añade Aurelio Morales.

En su opinión, la orca ha sufrido durante años una catalogación que no es real, lo que ha provocado una especie de leyenda negra sobre ella. "Las orcas son piscícolas, es decir, solo se alimentan de peces y no de otros mamíferos", añade el capitán, quien recuerda que el Estrecho de Gibraltar está considerado como uno de los pocos lugares del mundo para el avistamiento de cetáceos al ser punto de unión entre el Mediterráneo y el Atlántico. "En estas aguas hemos contabilizado hasta siete especies diferentes y hemos visto desde tiburones martillo hasta ballenas jorobadas. La biodiversidad que se da en esta zona es increíble", concluye.